Algunos secretos es mejor no revelar, excepto esta autora Phillyrican
"Nada es lo que parece, y cuando todo que ella conoce es revelado como una mentira, Anastasia necesita creer en una imposibilidad..."
Anastasia Phoenix está buscando la verdad, pero tan sólo ha vivido una vida llena de mentiras. Sus difuntos padres le decían con frecuencia que su vida de trotamundos se debía a una carrera como ingenieros químicos prodigios. Falso: eran súper espías para una organización privada y clandestina. Todos a su alrededor creen que la desaparición de su hermana se debe a que también ha fallecido. Falso: ¿quizás?
En el thriller que está por venir de literatura juvenil escrito por Diana Rodríguez Wallach, nos vemos inmersos en una enrevesada red de teorías conspirativas, espionaje y desinformación, que nos llevan junto a Anastasia en su mundial y épica búsqueda de respuestas y, por supuesto, del cuerpo vivo de su hermana Keira. El misterio de preadolescentes y adolescentes está inspirado y vagamente basado en un espía ex comunista durante la Guerra Fría en la antigua Checoslovaquia, quien enseñaba a nuevos periodistas en la Universidad de Boston cómo no sólo saber si alguien te estaba informando de manera deshonesta, sino también cómo engañar persuasivamente a otros, sosteniendo una pena de muerte sobre su cabeza hasta el principio del siglo XXI.
Ahora bien, el experto en desinformación pinta acuarelas, pero esa es su historia. Anastasia Phoenix desentrañará y se relajará, enredándose en una ruta convulsa que se extiende desde Boston hasta Tuscany, desde Londres hasta Río de Janeiro, y cubrirá destinos que aún están por revelarse (o descubrirse).
Anastasia puede haber llegado incluso hasta Filadelfia, así como Wallach, una orgullosa Phillyrican, quien se adscribe al cliché de escribir lo que se sabe y, al pasar el tiempo, ha demostrado ser fiel a su divisa.
Aunque Wallach no es todavía un apellido transformado en marca en la Literatura para Jóvenes Adultos (YA por sus siglas en inglés), como sus predecesores J.K. Rowlling, Stephenie Meyer, Suzanne Collins, Scott Westerfield o James Patterson, ella ha sido una escritora a tiempo completo, publicando piezas investigativas en periódicos neoyorkinos o publicando e-books sobre giros modernos en la mitología, desde hace una década. Si primera trilogía “Amor and Summer Secrets” lleva a una adolescente latinoamericana de 15 años, insegura sobre su identidad Latino Americana, a un pueblo remoto en las montañas de La Cordillera en Puerto Rico, para explorar sus raíces (y conocer a un chico guapo en el camino).
El personaje principal en la serie de “Amor and Summer Secrets” es prácticamente una manifestación adolescente de la ascendencia y trasfondo de Wallach, una extensión ficcional de sus propias y genuinas preocupaciones al crecer en Ridley Township, hablando inglés en casa con su padre Puertorriqueño de tez clara y su madre polaca de cabello rubio, dudosa sobre su capacidad de “hacer propia” su Latinidad:
“Mi padre es de Utuado, Puerto Rico y vivió allí hasta que tuvo ocho años, y mi madre es polaca. Ambos se conocieron en Chester (no exactamente el pueblo más simpático), así que siempre bromeamos diciendo que son la versión ‘disléxica’ de West Side Story, porque es al revés. Así que ambos se conocieron, mi madre fue a Chester High y mi padre a St. James, y han estado juntos desde la graduación. Somos Polacos-Puertorriqueños, que no es una mezcla común y es así como terminé ingeniándome el contexto de mi primera serie de libros. Mi padre jamás nos habló español en casa, sólo nuestros abuelos lo hacían, así que quise darle a ella (al personaje principal) una experiencia con la que yo había lidiado y que es: a medida que te haces mayor tienes que ir y ver tus raíces por ti mismo”.
“Yo siempre sentí vergüenza (de mi etnicidad) pues siempre pensé que estaba fingiéndola. No hablaba español, tenía pecas y el cabello rojizo, y definitivamente no me veo como Sofía Vergara, entonces pensé que no debía ser Latina. Pero a medida que fui creciendo me di cuenta de que sólo me salté una generación, una generación inmigrante de primera clase. Estoy mucho más cerca de mis raíces que muchas de las celebridades que afirman sobre ellas, así que he llegado a abrazarla (mi Latinidad) y a participar mucho más en la comunidad de Filadelfia y sus alrededores”.
Y así lo ha hecho. Tras la extraña coincidencia de habitar con su actual marido a cinco cuadras del desolador escenario de la caída del World Trade Center, Wallach ha divulgado que “caminar todos los días frente a esa horrorosa escena, sabiendo lo que sabes, mirando afiches de personas desaparecidas en el metro y literalmente pudiendo oler el residuo de la tragedia en el aire durante meses, te hace reevaluar tu vida”. El nuevo capítulo de Wallach comprendió su regreso junto a su pareja a su originaria Filadelfia y comenzar un trabajo en el Philadelphia Education Fund. Este cambio de carrera comenzó con su ferviente compromiso de inspirar estudiantes, particularmente los de bajos recursos, en Filadelfia y en Lancaster, a motivarse a sí mismos y engrandecer sus potenciales intelectuales y creativos.
Cuando el primer libro de la serie “Amor and Summer Secrets” fue publicado, Wallach estaba leyendo en el Taller Puertorriqueño; colabora actualmente con The Philly Spells Writing Lab y ha dirigido muchos talleres de escritura creativa, dando charlas en escuelas como Kensington High School, donde dice sentirse “constantemente sorprendida” por el entusiasmo y las reacciones constructivas que surgen de sus discusiones. Ella atribuye esta pasión vocacional de sus talleres a dos cosas: la primera es que al tratarse de estudiantes de bajos recursos, no suelen tener la cantidad de actividades extracurriculares y de enriquecimiento como sus colegas ricos y blancos, y la segunda es que encuentran en el trasfondo de Wallach algo a lo que aspirar.
“Al comenzar mis talleres pregunto: ‘Alcen la mano si creen que lo siguiente es verdad: ¿Yo nací en The Main Line?’ Siempre levantan las manos, porque me veo y me visto de una manera particular que no se asocia con alguien nacido en un pueblo obrero. Entonces pregunto: ‘Levanten la mano si alguno de ustedes cree que mi padre nació en los proyectos’. Nadie la levanta y casi siempre están en shock al oír que su primer idioma fue el español, que vivió en la pobreza la mayor parte de su infancia y que luchó por hacerse con un lugar propio. Pero se obligó a sí mismo a pasar ocho años en la escuela nocturna para obtener su título y miren lo que logró. Soy escritora, mi hermano es el presidente de la Gran Cámara de Comercio Hispánica de Filadelfia. Él es la prueba viviente de lo que un título puede hacer no sólo por ti sino por toda una generación subsecuente. Siempre le digo a los niños en estas escuelas que ellos PUEDEN salir, que ES posible, pero que no puede ser enseñado, que el deseo de tener éxito debe venir de adentro”.
Aunque Wallach no parece disminuir su pasión por la educación o por la crianza de dos hijos (uno de los cuales se encuentra en un programa intensivo de español en una escuela pública de Filadelfia), sí enfocará parte de su energía en la promoción y en el crecimiento del universo de Anastasia Phoenix en “Proof of Lies” y sus seguidores, hasta el lanzamiento del primer libro de las series que, de acuerdo a Entangled Teen, está planeado para Marzo del 2017. Wallach espera convertirse en “otro John Green”, uno de sus ídolos en la Literatura para Jóvenes Adultos, y espera ganar seguidores no sólo por su quehacer, sino sobretodo por su reconocida naturaleza inspiradora y alentadora.
Algún día, quizás, la próxima generación de Phillyricans y Latinoamericanos filadelfianos puedan referirse a Diana Rodríguez Wallach como uno de los secretos mejor guardados de la ciudad, su gran musa de la literatura juvenil.
DEJE UN COMENTARIO:
¡Únete a la discusión! Deja un comentario.