Hijo de inmigrantes mexicanos, de Michoacán, la vida del astronauta José Hernández no es la historia de alguien que despegó como un cohete. Por eso, porque no lo tuvo fácil y aún así logró cumplir un sueño de dimensiones “astronómicas”, se ha convertido en una inspiración para muchos latinos en Estados Unidos. Y él, generoso como es, no ha dudado en compartir su historia con una infancia mudándose de pueblo en pueblo, y una maestría en la Universidad de California, para acabar sumándose al equipo de la NASA en 2007.

Pero eso solo es una parte de su increíble trayectoria, que el astronauta reveló en su autobiografía Reaching for the Stars, publicada en 2012, y que ha sido adaptada al cine y dirigirá para Netflix próximamente la cineasta mexicana Alejandra Márquez Abella.

Con guión de la difunta escritora germano-estadounidense Bettina Gilois, A Million Miles Away no es solo la primera cinta de habla inglesa de Márquez Abella, que consiguió el aplauso de la crítica en 2018 por Las Niñas Bien, sino también apunta a ser un biopic realmente sorprendente y emotivo donde tal vez se nos revelen algunos datos biográficos de Hernández que muchos ignoran, como que antes de convertirse en astronauta José desarrolló el primer sistema de imágenes de mamografía digital de campo completo para la detección temprana del cáncer de mama, o todos los obstáculos que tuvo que saltar para convertirse en miembro de la tripulación de la misión espacial STS-128 en 2009.

Aunque aún no sabemos nada sobre el reparto de la película ni su fecha de estreno, A Million Miles Away empezará a rodarse en 2021. Habrá que estar atentos al aterrizaje.