LIVE STREAMING

Ex-comandante latino de EE.UU. en Irak aspira al Senado

Ricardo Sánchez busca representar a Texas.

MÁS EN ESTA SECCIÓN

¿Dinero más barato?

¿Listos para la deportación?

La alarma de los drones

¿Cómo proteger sus derechos?

TikTok pierde de nuevo

La cacería avanza

¿De dónde vino el covid?

Trump promete y cumple

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

El general Ricardo Sánchez, que fue comandante de las fuerzas estadounidenses en Iraq en época de los abusos en la prisión de Abu Ghraib, se postulará para la candidatura demócrata por Texas al Senado de Estados Unidos, informó hoy el diario San Antonio Express-News.

"Sánchez registrará hoy su candidatura como el segundo aspirante demócrata de Texas al curul que dejará Kay Bailey Hutchison cuando se retire", escribe el diario.

Sanchez, de 57 años, dijo al rotativo de la ciudad tejana de San Antonio que al registrar hoy su candidatura, podrá iniciar la campaña de recolección de fondos.

"La campaña electoral, que será la primera para Sánchez, comienza casi cinco años después del fin de una carrera militar que involucró a Sánchez en la guerra estadounidense más sangrienta desde Vietnam", dice el artículo que añade que el general es "uno de los hispanos que más alto rango alcanzó" en el Ejército de EEUU.

Sánchez explica sus ambiciones políticas por que "en Texas demasiadas familias bregan por sobrevivir, es difícil encontrar empleos, nuestras escuelas son deficientes, y el aumento de los precios de alimentos y gasolina está quebrando los presupuestos de las familias".

El otro aspirante demócrata al Senado es Sean Hubbard, de 37 años, que fue director de estrategia de un candidato al Congreso en 2002, y hay cuatro políticos republicanos que también aspiran al escaño que dejará Hutchison.

Sánchez fue el jefe de las operaciones militares de Estados Unidos en Irak en el período en el cual cientos de iraquíes fueron detenidos en Abu Ghraib y sometidos a abusos que salieron a luz en 2004 con la publicación de fotografías distribuidas mundialmente.

Las investigaciones militares eximieron a Sánchez de culpa pero el general pidió la creación de una comisión que analizara lo que "le ocurrió a Estados Unidos como resultado de la suspensión de las Convenciones de Ginebra" decretada por el entonces presidente George W. Bush. Nunca se creó esa comisión.

Según el diario de San Antonio, Sánchez dijo en una entrevista que su fe católica y su infancia en la pobreza en el valle del Río Grande guiarán su campaña política.

"Mientras que la explotación de las oportunidades políticas sea, para unos pocos en Washington, más importante que la protección y expansión de las oportunidades para todos, no lograremos los derechos que nos da Dios a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad", declaró el general retirado.