Por qué las fresas pueden ayudarte a dormir mejor
Si eres de los que sufre cada noche para poder conciliar el sueño, seguro que sabes que la comida que ingieres es uno de los factores que debes tener en cuenta. Mucho se ha oído aquello de que se debe “comer más sano para dormir mejor”. La alimentación, así como las preocupaciones y el estrés, son algunos de los factores que más influyen a la hora de poder tener un sueño de calidad.
La calidad de nuestro sueño depende en parte de la melatonina, una hormona que interrumpe sus procesos al reaccionar con la luz. Junto con la serotonina son las dos sustancias químicas encargadas de equilibrar nuestro sueño. El funcionamiento de ambas depende de un aminoácido llamado triptófano.
Las buenas noticias son que algunos alimentos son ricos en triptófano y, por lo tanto, dan un impulso a la serotonina y a la melatonina para que funcionen correctamente y protejan nuestro sueño. Entre estos alimentos se encuentran los pescados, la leche y las frutas del bosque. Entre estas últimas destacan las cerezas y las fresas. Por lo que se sitúan como uno de los mejores postres nocturnos si tienes problemas para dormir. Eso si, hablamos de la fruta fresca, no de zumos ni otros elementos que la contengan.
Alimentos ricos en triptófano
RELATED CONTENT
Las frutas del bosque no son los últimos alimentos que puedes tomar si tienes problemas para conciliar el sueño. Los expertos recomiendan incluir frutos secos como nueces y vegetales como el tomate en las cenas. Pero si buscamos añadir a nuestra dieta los alimentos más cercanos en melatonina, deberemos centrarnos en los cereales. Tanto el arroz como la avena y el maíz contienen altas dosis de melatonina. Sin embargo, no resulta aconsejable ingerir grandes cantidades por la noche.
El clásico vaso de leche
Siempre se ha dicho que las tradiciones tienen su razón de ser y es algo que sin duda se cumple con el tradicional vaso de leche nocturno. Según los expertos, tomar un vaso de leche tibia antes de dormir ayuda al cerebro a utilizar el triptófano de forma más productiva, provocando que la melatonina se produzca más rápido. Parece que nuestras abuelas tenían razón cuando decían aquello de que no nos podíamos irnos a dormir sin tomarnos un buen vaso de leche.
LEAVE A COMMENT:
Join the discussion! Leave a comment.