LIVE STREAMING
El actor mexicano Gael García Bernal es un actor comprometido. En la foto, durante su participación en un debate sobre México en el Festival de Cine y Derechos Humanos de Ginebra, celebrado el 13 de marzo, en el que denuncia los alarmantes niveles de violencia en su país pero, sobretodo, el hecho de que tanto la ciudadanía, como los gobernantes, como la comunidad internacional, se haya acostumbrado a ellos. EFE/ Marta Hurtado
El actor mexicano Gael García Bernal es un actor comprometido. En la foto, durante su participación en un debate sobre México en el Festival de Cine y Derechos Humanos de Ginebra, celebrado el 13 de marzo, en el que denuncia los alarmantes niveles de…

Bajo la batuta mexicana

MORE IN THIS SECTION

Green-Boned Dinosaur

Salt Museum in the USA

Hispanic culture on cinema

HHM Authors to Note

Celebrating Latino Artists

Use of Face Veils

Prince Harry in NYC

Mexico supports Coca-Cola.

SHARE THIS CONTENT:

Hace apenas diez días el director mexicano Guillermo del Toro se alzaba con dos Oscars por su película “The Shape of Water”, demostrando al mundo que México está más vivo y coleando que nunca. Por mucho en que se empeñe el presidente Donald Trump en ensuciar la imagen de los mexicanos, llamando a sus inmigrantes criminales y ladrones, es evidente que el arte y la cultura mexicana están en su mejor momento, y que la aportación de la comunidad latina en general a los Estados Unidos va mucho más allá de mano de obra barata, bandas callejeras y traficantes de drogas o vendedores de tacos, cómo han sido retratados durante mucho tiempo en televisión.

Uno de los mejores ejemplos que ha dado la pequeña pantalla para demostrar cuán lejos puede llegar un individuo de origen mexicano (o de cualquier otro país latino), en los Estados Unidos es la serie “Mozart in the Jungle”, que el mes pasado estrenó su cuarta temporada. Producida por Amazon, la serie – ganadora de los Globos de Oro en 2016 - se inspira en un brillante y prometedor director de orquestra mexicano, Rodrigo de Souza (interpretado por Gael García Bernal), a quién le ofrecen dirigir la Sinfónica de Nueva York.

Probablemente ya hayan visto las tres primeras temporadas – y si no es el caso, para evitar spoilers – así que me limitaré a destacar el incalculable valor que tiene escuchar en televisión la voz de un personaje mexicano hablando en inglés con acento español sin tapujos ni vergüenzas. Souza habla en su inglés mezclado con expresiones mexicanas a quién sea: músicos, amantes, políticos, “donors” y multimillonarios de la élite cultural de Nueva York. “Ay, Dios, Ay”, “Ay, hermano” … intercala Rodrigo cuando habla o bebe su “mate” en el backstage.  

(En este post de Instagram, Gael hace broma de su acento español, refiriéndose a la actriz que interpreta a su esposa en la serie como "guaif" en lugar de "wife")

El mensaje de Rodrigo a los latinos en esta serie está claro: “Sí, podemos”. Sí, a pesar de ser mexicanos, colombianos o lo que sea, podemos triunfar en Nueva York, tener éxito en nuestras carreras, ser reconocidos a nivel mundial, dedicarnos al arte y a la música, ser los mejores en lo nuestro, ser respetados. “La música es mi vida, es la verdadera forma con la que me comunico con el mundo, conmigo mismo”, dice Souza con su encantador acento español en un momento de la temporada 3.  

Es cierto que la serie también tropieza con algunos estereotipos mexicanos, pero lo hace de una forma cariñosa y positiva: el desparpajo, la espontaneidad y la pasión “latina” que refleja el personaje de Rodrigo, versus la ambición por el dinero y la fama, el individualismo y el control emocional que muestran los personajes anglosajones. Este contraste de valores culturales sirve al productor, Roman Coppola, para trasmitir al espectador que la riqueza de la diversidad cultural en EEUU es precisamente saber tomar lo mejor de cada cultura, buscar el equilibrio entre emoción y laboriosidad, pasión y ambición, aprender del respeto por la familia y las raíces que muestran los latinos, sin renunciar a los sueños individuales (el paradigma de la cultura estadounidense).

Esta idea - didáctica y esperanzadora a la vez - de aprender de las dos culturas – la mexicana y la estadounidense- también se refleja muy bien en la última producción de Pixar, “Coco”, ganadora de un Oscar a la mejor película de animación de 2018.  El protagonista de Coco un niño mexicano llamado Miguel sueña con ser músico. Igual que Rodrigo, deberá romper las cadenas que le atan a su país para poder dedicarse a su pasión: la música.

“Escuchar música [clásica] debería ser un derecho para todo el mundo, porque te da paz, incluso cuando en tu mundo no hay paz”, como dice Rodrigo de Souza en uno de los últimos capítulos de la tercera temporada, después de llevar a la Sinfónica de Nueva York a tocar frente a los presidiarios de la cárcel de Rikers island.

  • LEAVE A COMMENT:

  • Join the discussion! Leave a comment.

  • or
  • REGISTER
  • to comment.
  • LEAVE A COMMENT:

  • Join the discussion! Leave a comment.

  • or
  • REGISTER
  • to comment.