El gobierno de Pensilvania continúa avanzando en su cruzada contra el gran número de muertes por sobredosis de medicamentos y/o opiáceos en el estado, que comenzó en octubre de 2015 —con la aprobación de una 'standing order’ que autorizaba la distribución del medicamento que la combate, naloxona, a todos los ciudadanos que lo solicitasen— y continuó a finales de año de la mano de la medida que autorizaba a Pennsylvania Capitol Police a llevar naloxona.

Ahora, la Administración Wolf ha dirigido su mirada a los centros educativos del estado, anunciado una colaboración con la farmacéutica Adapt Pharma para ofrecer el espray nasal Narcasan (una de las marcas de naloxona) de manera gratuita a todos los centros educativos públicos de Pensilvania.

“Estoy encantado de anunciar el siguiente paso de mi administración en la lucha contra la epidemia de opiáceos”, aseguraba el gobernador Wolf en un comunicado. “Equipando a profesionales formados en el uso de este medicamento en los colegios estamos ofreciendo otra manera de salvar la vidas de los habitantes de Pensilvania. Es nuestra responsabilidad dar otra oportunidad de vivir a la gente que está luchando”.

Con este acuerdo, al que se han unido los departamentos de Salud, Educación y Programa de Drogas y Alcohol, Pensilvania se convierte en el primer estado del país en participar el programa anunciado por la farmacéutica hace tan solo unos días en colaboración con Clinton Health Matters Initiative de Clinton Foundation.

Además de la distribución de este medicamento gratuito, de la que se encargará el Departamento de Salud del estado de Pensilvania, Adapt Pharma también ha concedido una subvención a la Asociación Nacional de Enfermeras Escolares (NASN, según sus siglas en inglés) para formar a estos profesionales en la educación a los jóvenes en la prevención de sobredosis.

La medida también ha sido celebrada por el secretario de Educación, Pedro Rivera, quien ha destacado que tener “profesionales entrenados en nuestros colegios puede reducir el tiempo de respuesta permitiendo recibir tratamiento rápido ante una sobredosis en una escuela”.

Y esta no es la única iniciativa reciente en la que trabaja el gobierno de Pensilvania al respecto. La Administración Wolf también ha desvelado que se encuentra ultimando un mapa que analice y prevenga las prescripciones fraudulentas, las cuales, tal y como señalan, fomentan este tipo de adicciones.