"Irán aun es la amenaza número uno para Israel", declaró Aaron Sagui ante un grupo de reporteros en Filadelfia, durante su reciente visita diplomática a la ciudad del amor fraternal. 

Además de dar algunas charlas con grupos y agencias locales, políticas y judías, Sagui aprovechó la oportunidad para hablar sobre la relación entre EE.UU. e Israel, y el interés de este último por ampliar sus relaciones en Latinoamérica.

"Trabajo en Washington D.C. que es la embajada más importante para el estado de Israel, siendo aliado tan cercano con Estados Unidos. Esta embajada está en medio de todo este trabajo tan sensible e importante por mantener y desarrollar aun más las relaciones entre nuestros gobiernos y nuestros pueblos", dijo Sagui en entrevista con AL DÍA. 

Como vocero de la embajada en Washington D.C., Sagui lleva sobre sus hombros la misión de mantener un equilibrio constante entre la política y el entendimiento mutuo.

"Tenemos 19 consulados en Estados Unidos, incluyendo uno aquí en Filadelfia. La comunidad de israelíes que han emigrado al país se concentra principalmente en Los Ángeles, Nueva York y en tercer lugar en Miami", dijo Sagui.

Aunque su labor es representar al estado de Israel, Sagui también cuenta con nacionalidad e identidad Argentina. Nacido en Buenos Aires, asegura que su argentinidad es un aspecto que se ha reforzando con los años porque ha vuelto a trabajar en Latinoamérica.

"Aunque a los cuatro años mi familia decidió emigrar a Israel y fue ahí donde crecí, en casa siempre conservamos la identidad latinoamericana entre nosotros", dijo Sagui. "Y justo cuando esa identidad e idioma se fue desconectando es que regresé a Argentina cuando era adolescente".

Esta experiencia personal le ha ayudado a admirar a  las familias que toman la difícil decisión  de dejar todo por emigrar de un país a otro. 

"Por ello admiro a mis padres que tuvieron que tomar esa decisión, que no es nada fácil, y también tengo un profundo respeto por las poblaciones del todo el mundo que llegan a Estado Unidos. Gente con mucho impetú  y trabajadora en un esfuerzo por mantener a su familia y tener que adquir una nueva cultura e identidad". 

Comenzando su carrera diplomática en el año 2000, su primer puesto fue como subjefe de misión en la embajada de Israel en Caracas, Venezuela, la cual cerró bajo el mandato de Hugo Chávez.

A esto le siguió el Ministerio de Relaciones Exteriores en Jersulén, donde trabajó para el Departamento de Suramérica.

"Uno no se puede preparar del todo cuando va a países tan distintos, el reto personal en este trabajo es asimilarse a cada lugar. En mi caso me acompaña mi familia entera, así que ellos también tiene que adaptarse, lo cual puede ser difícil", dijo Sagui.

Pero más allá de distintas culturas e idiomas, yace el reto de ser la cara de una causa y, como lo explicó el mismo, traducir esa realidad tan atípica que se vive en Medio Oriente.

"El reto es trasladar nuestras inquietudes y convencer sobre nuestro real deseo de vivir en paz con nuestros vecinos", dijo Sagui. "Quiza en EE.UU. es más simple porque creo que existe un entendimiento mayor y en Latinoamérica capaz y también".

Pero insiste en que algunos lugares de Europa hay un menor entendimiento por las circunstancias políticas y regionales,  o "nos aceptan menos".

"Somos los primeros en querer llegar a la paz lo más temprano posible, pero es un proceso en el que todos estamos embarcados. En la era moderna nos impacientamos y queremos que todo ocurra ahora, ojalá que esa paz llegue al Medio Oriente mucho más rápido".

Sagui declaró para el Jewish Exponent que Israel está siguiendo de cerca eventos en distintas parte de Europa en los que se ha  dado el discurso antisemita.

Por ahora el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel busca fortalecer sus lazos económicos con Latinoamérica, y los cinco miembros de la Alianza del Pacífico: Colombia, México, Chile, Perú y Costa Rica.

El plan aprobado en mayo pasado incluye la apertura de una nueva embajada en Paraguay, así como la expansión de operaciones en los países ya mencionados.  

"Buscamos un enfoque en toda la región para invertir en actividades en nuestras 14 representaciones diplomáticas localizadas en Latinoamérica", dijo Sagui. "Tenemos muchos jóvenes que al terminar su servicio militar eligen viajar por estos países, y de igual manera, hay muchos latinoamericanos que se han compenetrado muy bien con la sociedad israelí". 

Competente igual en hebreo que en español o en inglés,  Sagui  se declaró un fanático total de la selección argentina orgulloso de su herencia y sus aportes culturales.

"En el Mundial por supuesto voy por Argentina, aunque me encanta la forma en la que juega Colombia, Ecuador y la pasión de la Selección Mexicana", concluyó Sagui.