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Filadelfia pone fin a colaboración entre policía e inmigración

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Al cierre de este artículo el alcalde de Filadelfia, Michael Nutter, se disponía a firmar una orden ejecutiva que pondría fin a la mayoría de las peticiones de detención de inmigrantes por parte de ICE.

Esto luego de un esfuerzo liderado durante años por organizaciones que actualmente forman parte del Philadelphia Family Unity Network (PFUN), y aliados que consideran este acontecimiento como una "victoria histórica para la comunidad inmigrante".

"Ésta política será una de las más progresivas en el país para limitar el traspaso de no ciudadanos en custodia de la policía a agentes de deportación de ICE", dijo Nicole Kligerman, organizadora comunitaria de New Sanctuary Movement. 

El procedimiento conocido como "immigration detainer" o "immigration hold" es una petición por parte de inmigración a agencias locales de seguridad pública, a través del cual piden detener a individuos bajo su custodia por periodos de hasta 48 horas adicionales para comprobar su estatus migratorio y facilitar su transferencia a ICE.

Los llamados 'detainers' son parte del programa conocido como "Comunidades Seguras", a través del cual jurisdicciones locales comparten huellas digitales de personas arrestadas o bajo custodia con el FBI, y este envía automáticamente la información a ICE. 

Desde el 2008, Filadelfia ha permitido además, que ICE tenga acceso en tiempo real al Sistema Preliminar de Registro de la policía, mejor conocido por sus siglas en inglés como PARS.

Aunque estos programas se enfocan en criminales, personas que representan una amenaza pública, e inmigrantes que han violado las leyes de inmigración en repetidas ocasiones, han despertado críticas por su alcance indiscriminado y han llevado a la deportación a personas que están lejos de representar una amenaza seria a la seguridad pública.

Entre ellos se encuentran inmigrantes que entran en contacto con la ley, por ejemplo, tras ser detenidos por una falta menor de tráfico u otro tipo aunque esta no resulte en que se les presenten cargos.

Quienes se oponen a esta colaboración argumentan que las peticiones de detenciones de inmigrantes por parte de inmigración representan un gasto adicional de recursos para la policía que podrían ser utilizados en sus funciones regulares.

Por otra parte, que representa una amenaza para la seguridad pública ya que algunos miembros de la comunidad inmigrante se pueden negar a reportar crímenes y cooperar con la policía por temor a la deportación.

Con la nueva política, Filadelfia ahora se une a diversas ciudades, condados y estados a través de la nación que anteriormente ya se habían negado a honrar las peticiones de detención de ICE o establecido una serie de guías para dicho proceso.

De acuerdo a PFUN si anteriormente bastaba que un agente de inmigración solicitará a las fuerzas de seguridad locales mantener detenido a individuo bajo su custodia, la nueva política requerirá que haya de por medio una orden judicial.

"Estamos increíblemente orgullosos de decir que ahora tendremos una de las políticas más progresivas en el país, la cual, en práctica, pondrá fin al uso de 'ICE holds' en nuestra ciudad", dijo Erika Almirón, directora de Juntos. 

"Implementar esta política envía un mensaje claro de que Filadelfia no participará en un proceso que llevará a nuestras familias, amigos y vecinos a un esfuerzo de deportación masiva sin el debido proceso", dijo Mia-lia Kernan, organizadora de 1Love Movement.

Por su parte, Alison Sprague, directora de Victim/Witness Services of South Philadelphia, agregó que "esta política comenzará a ayudar a construir la confianza entre los miembros de la comunidad y la policía de Filadelfia, haciendo nuestras comunidades más seguras".

Caitlin Barry, profesora asistente de la Escuela de Leyes de la Universidad de Villanova, quien trabajo con PFUN en este esfuerzo, se mostró optimista de que la nueva política pondrá fin a la mayoría de 'ICE holds' en la ciudad, aunque expresó su preocupación por la correcta implementación de ésta.

"Vamos a tener que asegurarnos de que la nueva política sea implementada y de que los agentes de la policía sean educados al respecto", dijo Barry.

Aun están por verse los detalles de esta nueva política, que por ahora, ha sido recibida como una buena nueva por la comunidad inmigrante, aunque a otros la noticia les llegó muy tarde.

"En este día histórico, también nos lamentamos por muchos de los miembros de nuestra comunidad que no están aquí hoy porque están detenidos o han sido deportados a través de los 'ICE holds' y de otros mecanismos de deportación masiva", finalizó Blanca Pacheco, organizadora comunitaria de New Sanctuary Movement.

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