Mientras que el arzobispo de Filadelfia, Charles Chaput, el alcalde Michael Nutter y el gobernador de Pensilvania, Tom Corbett, arribaron el lunes pasado en Roma para reunirse con el papa Francisco, feligreses católicos de Filadelfia se manifestaron y exigieron ser escuchados por sus pastores.

"Nos llaman hermanos, nos llaman familia pero cada vez que ponemos un pie en la Arquidiócesis o en la catedral, nos dicen que es propiedad privada. El problema principal es que la arquidiócesis nunca ha estado dispuesta a hablar con ningúno de nosotros", dijo Miguel Ortíz, líder del grupo 'Salvemos La Milagrosa'.

Integrantes de este grupo junto a miembros de 'Keep the Faith in Frankford' se manifestaron el pasado 20 de marzo frente a las instalaciones de la Arquidiócesis de Filadelfia ante lo que consideran una falta de interés y comunicación por parte de la iglesia.

"¿Cómo podemos acoger el Encuentro Mundial de las Familias cuando no escuchan a las propias familias de Filadelfia?. Cerrar parroquias no es la respuesta que resolverá los problemas en la Arquidiócesis", dijo Patricia Smiley, líder de la organización 'Keep the Faith in Frankford'. 

El grupo de manifestantes protestó el cierre de 26 parroquias durante el 2013. Los cierres se realizaron a través de la Iniciativa de Planificación Parroquial, realizada a través del clero y un selecto número de representantes de las parroquias. 

"Creemos que este proceso no es el correcto. El cierre de estas iglesias afecta a todos los residentes de la comunidad a la que sirven, es hora de ponerse de pie y ser escuchados para ser realmente parte de la solución que mantiene viva nuestra fe en estas comunidades", dijo Smiley.

Durante su visita en Roma, los tres líderes se reunieron con el papa y otros funcionarios del Vaticano para discutir el Encuentro Mundial de las Familias 2015, que tendrá lugar en Filadelfia. El trío tuvo una recepción privada de dos horas con el papa este miércoles. 

"La visita de su santidad ofrece tanto un momento único en nuestra historia, así como una oportunidad de señal para resolver los problemas fundamentales de la familia, el amor, que se encuentra en el corazón de esta institución vital, la justicia y la paz", dijo el alcalde Nutter.

El Encuentro Mundial de las Familias se convoca cada tres años por la Iglesia Católica Romana para promover los valores familiares y tradicionales de la iglesia. Se espera que reunirá a cientos de miles de personas en Filadelfia. 

Sí el papa Francisco acepta visitar Filadelfia, el gobernador Corbett declaró que el evento podría atraer a más de 1 millón de visitantes y $100 millones de dólares de estímulo económico para Pensilvania.