Grupos comunitarios y miembros del Concejo de Filadelfia se reunieron en City Hall para pedir a la administración del alcalde Michael Nutter eliminar el procedimiento conocido como 'ICE holds', y crear una nueva política de inmigración.

La conferencia se realizó el 20 de febrero en anticipación a la audiencia que se llevará a cabo el próximo 3 de marzo, en la que se discutirá la colaboración entre el Departamento de Policía de Filadelfia y la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE).

Los concejales James Kenney, María Quiñones-Sánchez, del Distrito Siete, Jannie Blackwell, del Distrito Tres, y Blondell Reynolds Brown estuvieron presentes durante la conferencia.

"En la discusión que se llevará acabo próximamente hablaremos sobre cuál es la mejor política, es nuestro deber distribuir el mensaje de lo que es justo. Las deportaciones es lo más anti-americano que existe", dijo la concejal Quiñones-Sánchez.

Agregó que también hay que analizar cuanto le cuesta a la ciudad y a los contribuyentes  sostener el proceso de los 'ICE holds'.

El procedimiento conocido como "immigration detainer" o "immigration hold" es una petición por parte de inmigración a agencias locales de seguridad pública, a través del cual piden detener a individuos bajo su custodia por periodos de hasta 48 horas adicionales para comprobar su estatus migratorio y facilitar su transferencia a ICE.

Los llamados 'detainers' son parte del programa conocido como "Comunidades Seguras", a través del cual jurisdicciones locales comparten huellas digitales de personas arrestadas o bajo custodia con el FBI, y este envía automáticamente la información a ICE. 

Aunque el programa se enfoca en criminales, personas que representan una amenaza pública, e inmigrantes que han violado las leyes de inmigración en repetidas ocasiones, ha despertado críticas por su alcance indiscriminado y ha llevado a la deportación a personas que están lejos de representar una amenaza seria a la seguridad pública.

Entre ellos se encuentran inmigrantes que entran en contacto con la ley, por ejemplo, tras ser detenidos por una falta menor de tráfico u otro tipo aunque esta no resulte en que se les presenten cargos.

"Los inmigrantes deben tener un lugar en la mesa de negociación con la administración del alcalde Nutter, tener la oportunidad de expresar cómo los 'ICE holds' devastan nuestras familias y comunidades todos los días, además de crear una mejor política", dijo Blanca Pacheco, organizadora comunitaria de Movimiento Nuevo Santuario. "Tenemos que poner fin a esta relación tóxica entre la policía y ICE para todas las personas, independientemente de dónde vengan o si han estado involucrados en el sistema judicial. Eliminar 'ICE holds' es un derecho humano básico respetado por más de 20 localidades en todo  EE.UU. Es hora de que Filadelfia comience a respetar los derechos humanos de los no-ciudadanos".

"El proceso de 'Detainers' no es la respuesta. El Departamento de Policía tiene todo el poder que necesitan para investigar a fondo, procesar y sentenciar, y cuando sea necesario, iniciar un proceso de deportación. Por ello estamos pidiendo es un debate público que tanto necesitamos aquí mismo en el concejo", dijo la concejal Quiñones-Sánchez.

Los 'ICE hold' no son peticiones obligatorias por parte de la oficina federal de deportación a la policía local de Filadelfia.

Se espera que el alcalde Nutter firme próximamente una orden ejecutiva que elimine el controversial acuerdo que permite a agentes federales detener a inmigrantes por ofensas menores.

Por su parte la concejal Blackwell dijo que toda persona en la ciudad merece ser portegido sin importar de dónde venga.

"Hemos tenido una discusión a fondo sobre este asunto entre miembros de la comunidad africana y caribeña, quienes estarán presentes en la próxima sesión del 3 de marzo. Una mágnifica colaboración contra esta terrible problemática para asegurar que toda persona en esta ciudad estén protegidos sin importar de donde vienen. Todo el mundo quiere vivir buenas vida sin  tener la preocupación de ser detenidos", agregó.