Si miramos a las montañas de nieve acumuladas en las esquinas no creemos que el calendario ha pasado de invierno a primavera. 

'Todo depende del reloj que miramos', dijo Albert Einstein al explicar la teoría de la relatividad que lo consagró como un genio en la historia de la humanidad. 

Si andamos al compás del béisbol, el invierno terminó el fin de semana pasado cuando México derrotó a Puerto Rico 7 a 1 en el partido final de la Serie del Caribe y la primavera comenzó el día antes de las celebraciones de San Valentín cuando muchos de los equipos de Grandes Ligas abrieron sus campos de entrenamiento. 

La Serie del Caribe fue un éxito para el béisbol latino. No se terminó el mundo cuando se incluyó a Cuba en el Clásico Caribeño. 

El rendimiento del equipo que representó a Cuba (Villa Clara), fue decepcionante pero mostró que el béisbol del resto del Caribe no es débil. Cuba sólo ganó un partido y terminó el Clásico Caribeño 1-3. 

Los dos equipos considerados más enfermizos del evento terminaron peleando por el cetro. El béisbol continúa vivo en México y en Puerto Rico. 

Para los Aztecas, la cenicienta de muchas series caribeñas, el campeonato marca su segunda corona consecutiva. El béisbol en México ha mejorado y los escuchas deben de contratar a peloteros al por mayor al sur de la frontera en vez de pagar precios altos por presas preciosas de Japón.

Los Phillies quizás recuperen su inversión en Sebastián Valle el nativo de Los Mochis. Este lideró el torneo de campeones en carreras impulsadas (7) y fue seleccionado el receptor del equipo todos estrellas del evento. 

Valle fue bajado del roster de 40 de la organización de Filadelfia en el otoño pero recibió una invitación a los campos de primavera de los Phillies. El receptor de 23 años recibirá la oportunidad de mostrar que merece continuar en el ascensor hacia las Mayores. El bateador derecho quien lució promedio de .304, 3 HRs y 15 RBIs en la Liga Mexicana del Pacifico en 138 turnos y bateó .333 con 2 HRs y 7 RBIs en la Serie del Caribe, tiene que demostrar esta primavera que no es el mismo bateador quien sólo logró promedio de .203, 12 jonrones y 41 remolques en 354 turnos en doble A con Reading. La edad de Valle es tal que ya no es considerado un prospecto. Si no se asienta en triple A al final de marzo tendrá que probar su suerte con otra organización. 

Puerto Rico se dio a respetar en la Serie Del Caribe. Muchos consideran el béisbol muerto en la Isla del Encanto pero la pelota continúa siendo un arte para sus practicantes. No existe el volumen de talento de antes pero lo que hay no se rinde fácilmente.

Esperamos que podamos decir lo mismo de los Phillies este año. Los numeritos dicen que el equipo de Filadelfia no tiene chance. 

Sin embargo, los que conocen el deporte dicen que existe material en los Phillies para dar sorpresas como lo hicieron los Aztecas y los Boricuas en la Serie del Caribe. 

Comenzando esta semana, los Phillies mostraran si tienen suficiente para mantener vivas las esperanza de sus seguidores. 

La esperanza es una de las características de la primavera y eso es una de las razones porque la apertura de los campos de entrenamiento de los equipos de Grandes Ligas significa que se acabó el invierno en el calendario del béisbol. 

Cuando hay esperanza, no nos importa lo que diga el termómetro.