El salvadoreño Jorge Chicas, quien trabajó como chef ejecutivo de 'The Bazaar' en el hotel SLS en Beverly Hills, y obtuvo el reconocimiento del mejor restaurante del año por la revista GQ y Esquire, ha llegado a Filadelfia para liderar el 'Red Owl Tavern' en el Hotel Monaco.

Inspirado en su ubicación en Old City, alrededor de Independence Mall, la propuesta de Chicas para el restaurante es continuar con la cocina americana con un toque casual pero distintivo. 

Su menú, que será lanzado luego de 'restaurant week', refleja sus raíces latinas y su experiencia trabajando con distintos tipos de comida internacional, así como los sabores a los que los estadounidenses le han dado la bienvenida y han acogido como suyos.

Las frituras de cangrejo las adereza con un aioli de chipotle, los calamares fritos con cilantro y habanero, y uno de los cortes de res con chimichurri.

"La idea es agregar un toque latino pero que los americanos ya conocen", dijo Chicas.

Durante su corta estancia en Filadelfia, él se ha dedicado a explorar algunos de los mejores restaurantes de la ciudad.

Entre ellos destaca Tinto, del 'iron chef' José Garcés, y Morimoto y Buddakan, de Stephen Starr, además de Han Dynasty, Pizza Brain, y confesó que no se pudo resistir a probar un tradicional cheesesteak.

"Filadelfia tiene muchos restaurantes muy buenos y hay muchas personas que tienen una apreciación por la buena comida", dijo Chicas.

También ha identificado a diversos proveedores locales que ofrecen productos frescos y saludables, y entre los que destaca una compañía sustentable de mariscos y pescado.

Él estudió en L'Academie de Cuisine en Maryland, el Culinary Institute of America en Nueva York, y Lo Mejor De La Gastronomía en San Sabastián. 

Sin embargo, considera que gran parte de su experiencia viene de los platillos que ha probado alrededor del mundo, y de trabajar con grandes chefs, entre los que recuerda tanto a su abuela como al 'celebrity chef' José Andrés.

"Mi abuela me consentía mucho", dijo Chicas, quien confesó que de niño era algo quisquilloso a la hora de comer. "Siempre me gustaba ver cómo hacía las cosas y me inculcó los sabores que me gustan".

Por otra parte, dijo que haber trabajado durante 11 años con el chef José Andrés fue una experiencia que le abrió los ojos. 

"Él siempre trata de ver la manera no solo de enseñarte sino de desarrollar el paladar", dijo Chicas al recordar los viajes alrededor del mundo en los que "vivió" los aromas, los platillos y la tradición de distintos países.

Chicas nació en El Salvador pero se mudó a una edad temprana al área metropolitana de Washington D.C., en donde de adolescente empezó a trabajar en restaurantes informales al lado de sus padres, y luego en otros más formales en los que confirmó su vocación.

Ahora él está enfocado en dejar su propia huella en Filadelfia, y hacer del 'Red Owl Tavern' uno de los mejores restaurantes en la ciudad del amor fraternal.