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Lou Rodriguez, founder and CEO of Rodriguez Consulting.
Lou Rodriguez, fundador y director general de Rodriguez Consulting. Crédito de la foto: Harrison Brink (AL DÍA Archives)

La Universidad Rodriguez y Hopeworks se asocian para construir el futuro

Las dos organizaciones se han unido para ofrecer formación en obras de infraestructura a jóvenes que acaban de salir del instituto.

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Filadelfia, como todas las ciudades, se sustenta en una vasta red interconectada de tuberías que transportan elementos esenciales como el agua y el gas a las casas, al tiempo que evacuan las aguas residuales y pluviales.

El mantenimiento de este complejo sistema corre a cargo de ingenieros, técnicos y diseñadores, que hacen avanzar la ciudad paso a paso. Pero, como en cualquier otro trabajo, estos profesionales cualificados no surgen de la nada.

Recientemente, un plan fiscal del Gobierno -la Ley de Inversión en Infraestructuras y Empleo- implica un acuerdo bipartidista de 1 billón de dólares que podría suponer la creación de 800.000 puestos de trabajo para mediados de la década, lo que abre una posible vía profesional para muchos.

Hopeworks es una organización sin ánimo de lucro fundada en Camden por miembros de tres iglesias diferentes que pretendían ofrecer formación a los jóvenes de la zona que habían abandonado los estudios.

Recientemente, sin embargo, Hopeworks se ha expandido al barrio de Kensington, en Filadelfia, para poder ofrecer más fácilmente servicios a los jóvenes de la zona.

La organización ofrece formación a jóvenes adultos, enseñándoles diseño web y desarrollo digital, actuando como una vía alternativa a la educación superior al darles la experiencia y la formación necesarias para una carrera en el campo de la tecnología.

Pero esta no es la única carrera que quieren poner a disposición de estos jóvenes. Entra Lou Rodriguez, miembro de la junta de Hopeworks recientemente incorporado y fundador epónimo de Rodriguez Consulting.

Rodriguez Consulting es una empresa de ingeniería civil que trabaja con la gestión de infraestructuras y los sistemas de información geoespacial (SIG), o los trazados geográficos de las infraestructuras, como las conducciones de agua y gas por toda la ciudad.

Como alguien que ha estado comprometido con Hopeworks durante casi 20 años, Rodríguez ha trabajado en su consejo asesor de SIG y estuvo muy involucrado con uno de sus fundadores, el Padre Jeff Putthoff, durante sus inicios.

A lo largo de los años, ha planteado la idea de enseñar sobre el trabajo en infraestructuras, y sólo tuvo éxito cuando recibieron la subvención para financiarlo. De ahí surgió la Universidad Rodríguez.

Al asociarse con Rodriguez Consulting, buscan enseñar a los estudiantes habilidades relevantes para la industria de la infraestructura, financiando el proyecto a través de las conexiones y contribuciones filantrópicas de Hopeworks, comenzando con una fundación de $ 100,000.

Mientras que la Universidad Rodríguez ha estado activa desde 2019 y tomó su primera cohorte de seis aprendices en 2020, espera traer más estudiantes para enseñar habilidades relacionadas con la infraestructura y poner a los estudiantes en puestos de trabajo.

Al principio de la carrera de Rodríguez, la mayor parte del trabajo se hacía a mano, y el trabajo de redacción -o el trabajo de crear planos- lo realizaban los ingenieros.

Con el tiempo, cada vez más miembros de la industria se pasaron a la ingeniería, dejando vacantes para técnicos.

Rodríguez comparó su posición con la de los médicos y los abogados: cada uno no podía hacer todo el trabajo por sí mismo y dependía de un equipo de técnicos para hacer el trabajo que ellos no podían, lo que les daba margen para tomar decisiones de gran calado.

"Hay tantas opciones para que la gente vaya a la universidad y esa parece ser la principal vía de acceso al mercado laboral", explica Rodríguez. "No había muchas opciones para los que no querían seguir ese camino. Normalmente, era la universidad o el ejército".

Sentí que HopeWorks estaba satisfaciendo una gran necesidad social, pero incluso una necesidad empresarial; [hay] una necesidad de estos puestos de trabajo profesionales no titulados", continuó Rodríguez.

Según su experiencia, Rodríguez vio en las tuberías y las infraestructuras una fuente estable de empleo, a prueba tanto de recesiones como de pandemias, ya que ambas necesitan un mantenimiento continuo en toda la ciudad.

Formar a personas en infraestructuras se convirtió en una iniciativa beneficiosa para todos, tanto para ellos como para la ciudad y los aprendices, ya que Hopeworks necesita talentos formados en infraestructuras -sobre todo jóvenes talentos que sustituyan a los que están llegando a la edad de jubilación- en su nueva asociación, y los aprendices se incorporan a un sector estable.

"Cuando el mundo va despacio, cosas como las tuberías y las infraestructuras son una buena apuesta", afirma Rodríguez. 

"Así es como surgió la idea. Me había acercado a Hopeworks con una idea, dije 'quiero crear un programa de formación específico, dirigido a las infraestructuras de Filadelfia, incluso más específicamente dirigido a las infraestructuras del departamento de agua de Filadelfia, agua, alcantarillado y aguas pluviales', donde vi una necesidad."

El primer año de funcionamiento presentó retos únicos para la Universidad Rodríguez. Por un lado, la pandemia paralizó muchas industrias; el trabajo en infraestructuras no estaba entre ellas. 

Sintiendo que un espacio digital dificultaría el aprendizaje de los alumnos, Rodríguez los reunió en persona para que pudieran trabajar y compartir sus planes con más facilidad.

Debido a su reciente traslado a una nueva oficina en Kensington, Filadelfia, Rodríguez disponía de 6.000 pies cuadrados de espacio libre para repartir a sus estudiantes.

Tras la graduación de la primera promoción de Rodriguez University, tres de ellos pasaron a trabajar en el Departamento de Aguas, dos encontraron empleo en otras empresas y el último continuó su trabajo con Rodriguez Consulting, con quien sigue colaborando hasta la fecha.

Para Rodríguez, el mayor impacto que persigue con su trabajo no es de números, sino de escala. 

"Para mí, si todo lo que hiciera fuera ayudar a una persona, me iría con eso. Lo que hablamos en el programa... es un gran ejemplo de la importancia de conseguir un salario digno y un trabajo fijo a tiempo completo", dijo Rodríguez.

"En este caso, vinculado a algo como las infraestructuras, que son a prueba de recesiones en su mayor parte, e incluso a prueba de pandemias. No dejamos de trabajar durante la pandemia como... otras empresas", continuó.

Para la Universidad Rodríguez, sus objetivos son seguir aceptando más estudiantes y expandirse para ayudar a cubrir las plazas vacantes en el sector. 

Mientras trabajan con futuras cohortes, mantienen abierta la idea de que el programa pueda reproducirse en otros lugares, creando un nuevo estilo de programa de aprendizaje para el trabajo en infraestructuras utilizado a escala nacional.