Entre tanto Trumpismo, a veces pasamos por alto las transformaciones importantes que se están sucediendo a lo largo y ancho del continente.

Hoy fue el turno de la nación Argentina, cuya mutación política después de la derrota de Cristina Fernández de Kirchner ante el conservador Mauricio Macri en noviembre del 2015 ha volcado todos los dedos acusadores hacia la ex presidenta, quien acaba de ser elegida como senadora por la provincia de Buenos Aires.

Según reportaron medios locales, este jueves el juez Claudio Bonadio ha solicitado su desafuero después de procesarle por el supuesto encubrimiento de los autores del peor atentado en la historia del país.

Se trató de una explosión en un centro comunitario judío en Buenos Aires en 1994, que ha sido catalogado como un acto terrorista en manos de individuos iraníes, y que cobró la vida de 85 personas.

Según los documentos de la corte, la ex presidenta Kirchner habría encubierto el rol de Irán en el atentado, a cambio de un acuerdo de comercio lucrativo que nunca se consumó.

Para que la detención de Kirchner se lleve a cabo, el Senado del país deberá votar y tomar una decisión con una mayoría de dos tercios para quitarle la inmunidad a la ahora senadora y permitir que enfrente los cargos criminales, según reportó Vice.

Considerando que la bancada oficialista Cambiemos cuenta con 25 legisladores y que Kirschner encabeza un bloque minoritario de ocho senadores, la decisión final caerá en manos de “un peronista alejado de Kirchner”, Miguel Ángel Pichetto, con 25 senadores más, según explica el diario El País.

Por la seriedad de los cargos – que incluyen la traición a la patria – las autoridades han procedido a realizar redadas, arrestando a tres ex asesores del gabinete de Kirchner.

Sin embargo, ninguno de estos cargos es nuevo. La investigación llevada a cabo por Bonadio había sido iniciada por el fiscal Alberto Nisman durante el 2015, acérrimo opositor del Kirchnerismo, quien amaneció muerto en el baño de su vivienda, con un disparo en la sien. 

Por su parte, la ex presidenta aseguró en unas declaraciones ante los medios que las acusaciones en su contra son totalmente falsas y que forman parte de una cacería de brujas del nuevo gobierno. Para Kirchner, la acusación por traición a la patria está basada “en una causa inventada sobre hechos que no existieron”, explicó Infobae.

“Todo esto que sucede es un despropósito y un exceso, esto no tiene nada que ver con la justicia y la democracia”, aseguró. “Macri es el director de la orquesta y Bonadio ejecuta la partitura judicial”.

Si bien la remoción de la inmunidad parlamentaria es un caso excepcional en Argentina, sí existe el precedente del caso Julio De Vido, ex Ministro de Planificación que enfrentaba cargos de fraude y corrupción, donde el Congreso aprobó el desafuero, según recuerda el Washington Post