El 15 de mayo, después de sólo unas semanas de una Orden de Permanencia en el Hogar, el Gobernador Doug Ducey (R-AZ) emitió una orden para comenzar a reabrir el estado.

La reapertura parcial pronto incluyó barberías, salones, bares, reuniones religiosas, cines e incluso gimnasios.

Ahora, el estado está siendo testigo de las consecuencias.

Los bares son uno de los lugares más peligrosos para contraer el coronavirus, informó Healthline. Su lista de lugares de mayor riesgo para contraer la enfermedad incluye iglesias, piscinas y salones. Se ha permitido que cada uno de estos tipos de negocios opere en Arizona durante más de un mes, con restricciones limitadas en términos de capacidad y distanciamiento social.

Como resultado, Arizona se ha convertido en el hervidero de la nación para el coronavirus. Per capita, la tasa de infección es ahora tres veces más alta que la del estado de Nueva York. Cada día se observa un aumento de los casos, y algunos condados registran los mayores aumentos de un solo día desde el comienzo de la pandemia.

El 14 de junio, la tasa de infección de Arizona alcanzó los 60,5 por cada 100.000 personas, en comparación con los 12,5 por cada 100.000 de Nueva York, según datos de la Universidad Johns Hopkins.

Las defunciones por coronavirus en Arizona también se han duplicado desde principios de junio, de 900 a más de 1.800 en sólo dos semanas.

Arizona nunca ha exigido el uso de máscaras faciales, y el gobernador Ducey ha indicado que no lo hará un requisito en el futuro. Aunque el gobernador ha reconocido el reciente aumento de casos, ha dicho que un segundo orden "no está en discusión".

"Ponemos la orden de permanecer en casa para prepararnos para lo que estamos pasando ahora mismo y estamos preparados", dijo Ducey en una rueda de prensa. 

Hartos, múltiples voces están ahora hablando de las alarmantes tasas de coronavirus de Arizona. Se ha demostrado que la pandemia perturba desproporcionadamente las vidas de los negros y los latinos, por lo que algunos políticos Latinx también critican a Ducey, instándole a replantearse sus políticas.

"Tenemos una epidemia de cobardía que paraliza el liderazgo de nuestro estado", tuiteó el representante Rubén Gallego del 7º distrito del congreso de Arizona. "¿Qué va a hacer ahora que no hemos podido contenerlo?"

"Arizona necesita una acción rápida y decisiva para detener la propagación antes de que se pierdan más vidas innecesariamente".

Regina Romero, alcaldesa de Tucson, también dirigió un tweet a Ducey, instándole a tomar medidas decisivas mientras las hospitalizaciones por coronavirus siguen aumentando.

Ducey dice que los hospitales de Arizona tienen la capacidad adecuada para manejar el aumento, sin embargo Banner Health, el sistema de salud más grande del estado, se está acercando a su capacidad habitual de camas en la UCI. Si las tendencias actuales continúan, corre el riesgo de sobrepasarlas.

Aunque está entre las más graves, Arizona no está sola. Veinticinco estados, incluyendo Puerto Rico, han visto aumentar los casos en un 10% en dos semanas, informó NBC News. Los expertos en salud dicen que estas tendencias al alza están directamente correlacionadas con la reapertura demasiado temprana de los estados en todo el país.