El senador Bob Casey, el más veterano de Pensilvania, se presenta a la reelección, una noticia que seguramente será recibida con algarabía por sus compañeros demócratas antes de lo que se espera que sean unas duras elecciones presidenciales en 2024 en un estado en el que la batalla es crucial. 

"Amigos, me presento a la reelección", dijo Casey. "Todavía queda trabajo por hacer para acabar con el bloqueo, hacer frente a los poderosos intereses especiales y facilitar la vida de los trabajadores de Pensilvania. El mapa ha vuelto, y aún no he terminado". 

"Me presento a la reelección porque con tanto en juego para las familias trabajadoras de Pensilvania, quiero seguir ofreciendo resultados para Pensilvania", añadió.

El anuncio de Casey, que compite oficialmente por un cuarto mandato, es una ventaja para los demócratas, que lograron aumentar su número de escaños en el Senado en las recientes elecciones de mitad de mandato de 2022, pero se enfrentan a una ardua batalla en 2024 para defender escaños en varios estados indecisos -entre ellos Pensilvania-, pero también en estados rojos como Montana, Virginia Occidental y Ohio. 

En total, los demócratas defenderán 23 escaños, dos de ellos ocupados por independientes que se agrupan con los demócratas, en clara comparación con los 10 escaños que preocupan a los republicanos. 

Casey se había mostrado cauteloso ante las noticias sobre su futuro, especialmente tras un comienzo de año nada ideal. 

En enero, el veterano legislador anunció que se sometería a una operación para tratar lo que, según reveló, era un cáncer de próstata. Casi dos meses después de la operación, anunció que se había recuperado totalmente y volvió al Senado poco después. 

Casey, una figura popular en Pensilvania, es hijo del que fuera Gobernador de Pensilvania durante dos mandatos, Bob Casey Sr., y, al igual que su padre, fue también Auditor General del Estado de 1997 a 2005, antes de que se limitara su mandato. 

Después fue Tesorero del Estado de 2005 a 2007, antes de presentarse y ganar uno de los dos puestos en el Senado de los EE.UU., escaño que ocupa desde 2007. En total, se ha presentado siete veces a las elecciones estatales, en las que sólo ha sufrido una derrota. 

A pesar de no haber participado nunca en una carrera disputada al Senado -su última victoria en las elecciones de 2018 se produjo por un 13%-, Casey se enfrenta al reto de intentar recabar todo el apoyo posible en los 67 condados de Pensilvania. 

"He estado pasando años en la carretera y yendo a todos nuestros 67 condados y entregando para la gente de nuestro estado y las comunidades en nuestro estado", dijo Casey. "Y ese es el tipo de enfoque que llevaré a la campaña: Iremos a todas partes e intentaremos ganarnos todos los votos".

El veterano legislador contará también con el apoyo de su colega senador por Pensilvania John Fetterman y del gobernador Josh Shapiro. 

"Dimos la vuelta a Pensilvania el año pasado, y Bob fue una gran parte de ello. Ahora, vamos a devolverle el favor. Sigámosle y hagamos una donación a su campaña". escribió Fetterman en un tuit tras el anuncio de Casey.

Según sus declaraciones más recientes a la FEC, Casey tenía más de 3 millones de dólares en las arcas de su campaña. 

"Mi amigo y nuestro senador principal @Bob_Casey ha defendido a las familias trabajadoras de Pensilvania durante toda su carrera - y no va a parar ahora. Él tiene nuestras espaldas. Ahora, vamos a tener la suya. Ayúdale a seguir luchando por nosotros en el Senado", tuiteó Shapiro. 

En su anuncio de reelección, el senador citó proyectos de ley elaborados por un Congreso controlado por los demócratas, como el aumento del gasto en infraestructuras, por ejemplo en aeropuertos, la reactivación de la industria nacional de semiconductores, la reducción del coste de los medicamentos para los beneficiarios de Medicare, la lucha contra China y la superación del "estancamiento" de Washington. 

Antes del anuncio oficial el lunes por la mañana, Casey estaba trabajando entre bastidores para formar lo que sería su equipo de campaña. 

Según informó POLITICO el 5 de marzo, Casey estaba debatiendo quién sería su director financiero nacional y eligió a Tiernan Donohue como director de campaña. Donohue es antiguo colaborador de la campaña del senador demócrata por Arizona Mark Kelly y fue director de la campaña del demócrata por Pensilvania Val Arkoosh en su fallida candidatura al Senado en 2022.

En el mismo informe, también contrató a un "consejo de finanzas", que celebró su primera reunión el miércoles pasado, y ha programado recaudaciones de fondos, según dos demócratas familiarizados con la situación de Casey. 

Como no se espera que se enfrente a una fuerte oposición en las primarias, debería ser una carrera fácil hacia las elecciones generales, pero los republicanos están buscando vengar sus pérdidas en las elecciones de mitad de mandato de 2022, posiblemente convirtiendo al ex CEO de fondos de cobertura Dave McCormick en su principal contrincante contra Casey.