El presidente de El Salvador,
Mauricio Funes, aseguró este jueves que la cercanía con "el norte" o "el
sur" debe darse sin hipotecar la soberanía e independencia del país,
al defender la relación de su Gobierno con EE.UU. y Brasil.

"Somos un país pobre pero un país que tiene dignidad, y cuando yo
establezco relaciones con EE.UU., como cuando establezco relaciones
con Brasil y como cuando también refuerzo mis relaciones con
Venezuela y normalizo las relaciones con Cuba, lo hago manteniendo
la dignidad del pueblo salvadoreño", declaró Funes.

"Aquí el punto no es si la cercanía al norte o la cercanía al sur
ayuda o no, ambas cercanías tienen que darse sin hipotecar nuestra
soberanía y nuestra independencia", agregó el primer gobernante de
izquierda en la historia del país, en una entrevista con los canales
de televisión de la Telecorporación Salvadoreña (TCS).

Consideró que "ya no es el momento de los paradigmas y de los
modelos", sino de buscar "modelos de gestión económica y social
propios" que respondan a las necesidades del país.

"Ya no más alineamientos ideológicos en nuestras relaciones
internacionales, buscamos el provecho para nuestro país", afirmó.

"Nos conviene o no nos conviene reforzar las relaciones con
EE.UU. y con Brasil, por supuesto que nos conviene, pero también nos
conviene reforzar nuestras relaciones con Venezuela, con Cuba, pero
fundamentalmente con los países centroamericanos", opinó.

Argumentó que su Gobierno mira "hacia el norte", porque tiene la
"necesidad de construir relaciones estratégicas con la primera
potencia mundial", que recibe el 60 por ciento de las exportaciones
del país y donde reside "un tercio" de la población salvadoreña.

También defendió la cercanía con "el sur" para consolidar las
relaciones como bloque y establecer lazos "con aquellos Gobiernos
que han resultado exitosos".

Defendió que el Gobierno del presidente brasileño, Luiz Inácio
Lula da Silva, ha resultado "ser exitoso" en Brasil y en América
Latina.

Anticipó que durante la visita que Lula hará al país, prevista,
según la cancillería brasileña, para el 26 de febrero, esperan
formalizar un crédito por 500 millones de dólares que otorgará el
Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) y "otros
acuerdos de transferencia tecnológica".

Al asumir el Gobierno, en junio de 2009, Funes dijo que Lula y su
colega estadounidenses, Barack Obama, serían los referentes de su
mandato, y ese mismo día restableció las relaciones con La Habana,
tras casi medio siglo de distanciamiento entre ambas naciones.