El Senado de Haití destituyó la madrugada del viernes
a la primera ministra del país, Michèle Pierre-Louis, quien decidió
no asistir a su interpelación ante el hemiciclo, que finalmente
sometió a moción de censura su gestión de algo más de un año al
frente del Gobierno.

Por 18 votos a favor y una abstención, el Senado haitiano con 29
miembros se pronunció esta madrugada después de más de 10 horas de
enconados debates.

El grupo minoritario abandonó el hemiciclo en la fase final de la
sesión al entender que las normas no permitían proseguir con la
sesión después de la medianoche.

El Senado votó una resolución que consideró a partir de este
momento a la primera ministra como "dimisionaria" y pidió al
presidente haitiano, René Préval, tomar las disposiciones para
llenar el vacío del Gobierno.

Según la Constitución haitiana, Michèle Pierre-Louis debe
presentar su dimisión al jefe del Estado y seguir despachando
asuntos del cargo hasta el nombramiento de su sustituto.

El senador Joseph Lambert inició los debates con un crítico
resumen de la gestión de Pierre-Louis durante los 13 meses de
mandato en los que afirmó no hubo ninguna política económica,
industrial, comercial, social o ambiental, por lo que calificó de
"catastrófico" el resultado del Gobierno.

Sin embargo, su homólogo Evallière Beauplan respondió que los
resultados actuales no son atribuibles a ese Gobierno, sino que son
problemas heredados de otras administraciones.

Varios senadores expresaron entonces su deseo de que fuese
sometida a votación la eventual destitución de Pierre-Louis,
mientras que otros manifestaron que era ilegal e inconstitucional.

Según el senador Yuri Latortue, en el período de sesión
extraordinaria como el actual, los senadores tienen que tratar
únicamente los proyectos enviados por el presidente de la República.

"Estamos fuera de la Constitución", exclamó el senador Rudy
Herivaux.

Pese a la previsión antes de la sesión, los senadores no
discutieron el uso dado a 197 millones de dólares desbloqueados como
fondo de urgencia para atender a las víctimas y reparar daños de los
desastres naturales de 2008.

Este dinero procedió de los fondos conservados en el marco de la
cooperación con Venezuela a través del programa Petrocaribe, que
vende petróleo a precio preferencial a Haití.

Los parlamentarios que pidieron la sesión de interpelación son
miembros de la Plataforma Esperanza, aliados del presidente
haitiano, René Préval.

Poco antes de la sesión, el secretario general adjunto de la
Organización de los Estados Americanos (OEA), Albert Ramdin, pidió a
todas las partes que mantuvieran su apoyo al proceso de
estabilización política.

Cuando en abril de 2008 el Senado destituyó al antiguo primer
ministro, Jacques Édouard Alexis, pasaron seis meses antes de la
formación de un nuevo Gobierno.