Puede que el arte de volar no sea una tarea fácil, pero Zara Rutherford, a sus 19 años, demostró el jueves al mundo que los sueños pueden hacerse realidad.

La historia marcará el 20 de enero de 2022 como el día en que la piloto más joven batió el récord de vuelo en solitario, que en su día ostentó Shaesta Waiz, una piloto estadounidense de 30 años, en 2017. Rutherford completó su viaje de ida y vuelta en 155 días.

El viaje comenzó cuando Rutherford emprendió el vuelo partiendo de Bélgica el 8 de agosto de 2021. Un rastreador de vuelo de su ruta sobre 41 naciones y cinco continentes reveló los largos retrasos que Rutherford experimentó durante sus paradas de descanso.

En un informe de ABC News, Rutherford declaró al medio que los problemas con su visado, el COVID-19 y los contratiempos de mantenimiento hicieron que su viaje inicial de tres meses se prolongara hasta un total de cinco meses.

Otros problemas, como el clima peligroso y la búsqueda de refugio, también complicaron el viaje de Rutherford.  

No obstante, Rutherford celebra el logro de haber reducido la brecha de género en los vuelos en solitario en 11 años respecto a Travis Ludlow, de 18 años, que completó su vuelta al mundo el 12 de julio de 2021 en 44 días.

"Espero reducir la brecha de género en la Aviación y en la Ciencia, la Tecnología, la Ingeniería y las Matemáticas (STEM), pero también animar a las niñas y a las jóvenes a perseguir sus sueños", dijo Rutherford.

Para el viaje, Rutherford voló en un avión ultraligero, también conocido como aviación de ultramar, llamado Shark Aero. El avión era ligero, con un ala más pequeña, y estaba diseñado para viajar a altas velocidades de hasta 186 mph a campo traviesa.

El interés de Rutherford por la aviación comenzó a una edad temprana, ya que siguió los pasos de sus padres y abuelos, todos ellos pilotos experimentados. Realizó su primer vuelo a los 14 años.

Sam Rutherford, padre de Zara, declaró a ABC News que su hija aprendió a volar cuando tuvo la oportunidad de sentarse delante en un avión, y allí aprendió a "manipular los mandos y a mover la aeronave".

La ex plusmarquista Waiz dijo que estaba emocionada de ver a la joven con el reto que completó hace cinco años.

Otras aspiraciones de Rutherford son estudiar informática e ingeniería, así como convertirse algún día en astronauta.