Durante la pandemia del coronavirus, ha habido una escasez de equipo de protección personal (PPE) para los trabajadores de la salud, poniendo tanto a los médicos como a sus  pacientes en riesgo y puede ser mortal.  El 18 de noviembre, según el Philadelphia Inquirer, Pennsylvania reportó más de 6.300 nuevos casos de coronavirus y la mayor cantidad de muertes en un día desde finales de mayo. En noviembre, hubo un aumento de nuevos pacientes y más de 2.900 hospitalizaciones.  Muchos de estos casos han sido de latinos, que están desproporcionadamente afectados por COVID-19, según los Centros para el Con trol de Enfermedades (CDC). Esto se debe principalmente a que muchos trabajan en trabajos  esenciales, lo que los pone en un mayor riesgo.  También se debe a las menores tasas de seguro médico entre los latinos, dice Daniel López-Cevallo, que estudia las disparidades de salud entre los latinos, en una entrevista con NPR. La falta de atención médica puede contribuir a mayores tasas de diabetes y otras condiciones preexistentes que pueden hacer que los latinos sean más susceptibles a las complicaciones de COVID. En respuesta a la pandemia en curso y a la falta de PPE, el 16 de noviembre, la Independence Blue Cross anunció que distribuiría 500.000 más caras sin costo alguno a los trabajadores de la  salud en Filadelfia. Estas máscaras de protección personal se destinarán a los consultorios médicos y a las clínicas de las comunidades desfavorecidas y con pocos servicios en toda la región. 

“Desde que comenzó esta pandemia, Independence ha trabajado para apoyar a los proveedores de servicios de salud de nuestra región en la lucha contra COVID-19. Estamos donando estas máscaras para ayudar a proteger a los comprometidos trabajadores de la salud que están sirviendo en las primeras líneas de la batalla de COVID-19,” dijo el presidente y director ejecutivo independiente de Independence Blue Cross, Daniel J. Hilferty. 

“Debido a que la pandemia ha afectado desproporcionadamente a las personas de color y a las que se enfrentan a dificultades económicas, decidimos centrarnos específicamente en las  prácticas de ayuda en las comunidades minoritarias”, añadió. 

Independence se ha puesto en contacto con casi 3.000 oficinas de proveedores en toda Filadelfia, comenzando con aquellos que se encuentran en áreas médicamente desatendidas, proporcionándoles la oportunidad de solicitar máscaras. Los grupos de proveedores que tienen tres o menos proveedores pueden solicitar 500 unidades de máscaras. Los grupos con más de tres pueden solicitar 1.000. También, clínicas sin fines de lucro apoyadas por la Fundación Independence Blue Cross han sido contactadas en relación a las máscaras.  

Las unidades de protección son por orden de llegada. Se pueden utilizar siguiendo las directrices de los Centros de Control y Prevención  de Enfermedades y de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional.  

El miembro del personal Jesse Breitbart de  Terapia Física Wallace y Nilan, uno de los lugares que recibió las máscaras, dijo, "ha sido un  momento bastante difícil para todos nosotros y  este regalo nos permitirá tener una cosa menos de la que preocuparnos. Su acto de bondad está siendo compartido en un par de nuestras clínicas hermanas también, incluyendo una que acaba de agotar el suministro de las máscaras que teníamos en reserva".