Nina Vaca, CEO y presidenta de Pinnacle Group, habló sobre su historia personal y profesional, y como ambas están intrínsecamente relacionadas. Lo hizo durante su discurso de apertura de la Cumbre de Mujeres de AL DÍA, celebrada el pasado viernes 2 de noviembre en Filadelfia.

Vaca, que dirige con éxito Pinnacle Group –la compañía propiedad de un mujer que ha experimentado el crecimiento más rápido en todo el país– destacó a lo largo de su discurso las formas en que las luchas, los logros y el crecimiento de su compañía se entrelazaron con los desafíos y alegrías personales que la han hecho ser quien es hoy.

Vaca aseguró que, de alguna manera, su camino como empresaria comenzó con la muerte de su padre, cuando tenía 17 años, "el peor día de mi vida", confesó.

A partir de entonces y para hacer frente a esa lucha, tomó la decisión de enfocarse en la educación universitaria, por considerarla la mejor manera de poder mantener a su familia, quien emigró a California desde Ecuador cuando ella era niña.

Vaca ha tenido que hacer frente a altibajos en la fundación de Pinnacle Group, su propia compañía global de IT, el nacimiento de sus cuatro hijos, las dificultades financieras de su empresa tras la tragedia nacional del 11 de septiembre de 2001 y una grave crisis de salud. Y nunca dejó de enfocarse en su papel como empresaria y líder capaz de retribuir a los demás y abogar por las mujeres latinas y todas las mujeres en el mundo corporativo y empresarial.

"Sabes que tienes que traer lo mejor de ti", dijo Vaca de sobre su experiencia como inmigrante en los Estados Unidos.

Su deseo de retribuir, de asegurarse que sirve como mentora y apoya a los demás, es algo que dice que está arraigado en la orientación y la sabiduría de su madre. 

Cuando esta le contó sobre el terremoto de magnitud 7,8 que azotó su Ecuador natal en 2016, también le preguntó qué es lo que iba a hacer para ayudar a los que sufrían por esta tragedia. Aunque Vaca protestó, argumentado que ella era simplemente una persona frente a una catástrofe nacional masiva, su madre le dijo que no se preocupara por poner a todo el país sobre su espalda, solo necesitaba "aportar su granito de arena".

Vaca respondió utilizando su pasión por los triatlones para trabajar junto a otras personas para recaudar fondos suficientes para reconstruir viviendas para 40 familias en la ciudad ecuatoriana de Alegría. Y, dijo, es una lección que se aplica a todos los reunidos, como líderes latinas.

"No te estoy pidiendo que lleves a la comunidad latina sobre tus espaldas”, dijo Vaca a los más de 50 asistentes reunidos en la Cumbre de Mujeres de AL DÍA en Filadelfia. "Te estoy pidiendo que aportes tu granito de arena".