Guns N’Roses dijo que ‘no’, que cancelaba su actuación para prevenir más contagios del nuevo Covid-19 entre los asistentes a Vive Latino 2020, pero les obligaron a salir al escenario por contrato, según reportó El Universal. 

El mayor festival de música Latina del mundo se llevó a cabo en la ciudad de México pese las advertencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la petición de miles de mexicanos y con la sombra de la tragedia vivida en Asia y Europa planeando sobre sus cabezas. Epidemia global, ¿lo han oído? Eso no es el nombre de un grupo de rock. 

No hubo test de detección de coronavirus, aunque sí lo que los organizadores llamaron “medidas preventivas”. Es decir, tomar la temperatura con un termómetro láser a cada una de las 40.000 personas que asistieron a este multitudinario evento ni bien cruzaban las puertas del estadio. Solo durante el primer día, 27 personas tenían fiebre. 

También se acordó con la Secretaría de Salud Pública de México que habría 92 paramédicos, una decena de médicos y 8 carpas sanitarias en caso de que alguien empezase a padecer los síntomas. Unas medidas insuficientes, pero que tranquilizaron a muchos espectadores, a otros, incluso, les parecieron “exageradas”.

“Yo creo que esta pandemia mundial no tiene los niveles de emergencia que nos están diciendo -comentaba a Efe uno de los fans-. Creo que va más allá de nuestro conocimiento… está a nivel de los gobiernos. Yo vivo la vida como la he vivido siempre y no he cambiado nada ante la alerta”.

Según los últimos datos reportados, en el día de ayer los casos de coronavirus en México pasaron de 41 a 53 y ya se han extendido por todo el país.

De los 84 artistas programados en el festival, 72 se mantuvieron en cartel, además de Gun N’ Roses; entre ellos The Cardigans, Zoé Unplugged y Babasónicos. El resto decidieron cancelar sus actuaciones “por responsabilidad”. También acudieron numerosos espectadores con mascarilla, recibiendo recomendaciones a través de las pantallas gigantes del estadio sobre cómo debían toser “haciendo codito” y no establecer mucho contacto físico, pese a que no había ni 20 centímetros de distancia entre unos y otros. 

A Diego, espectador mexicano, la alerta le parecía también excesiva. Demasiado pánico, dijo. “Una docena de casos entre millones no es mucha cosa”, añadió.

Según los últimos datos reportados, en el día de ayer los casos de coronavirus en México pasaron de 41 a 53 y ya se han extendido por todo el país. También por el continente, siendo El Salvador y Nicaragua los únicos lugares donde no se han producido contagios. 

En Brasil, hay 234 personas que han dado positivo de Covid-19; en Perú, 86; en Argentina, 65, y en Colombia, 54. Y aunque estas cifras no superan a los más de 81.000 enfermos de China, los 28.000 de Italia y los 15.000 y 10.000 de Irán y España, respectivamente, el virus ya ha llegado a África y sigue multiplicándose a una velocidad de vértigo. 

¿Por qué se han cancelado o pospuesto otros grandes festivales como el Pa’l Norte de Monterrey o Coachella, en el desierto de Colorado, y Vive Latino decidió tomarse a broma sus riesgos?

La respuesta, según los miles de asistentes que decidieron quedarse en casa y tuitearon su frustración, fue porque los organizadores no querían perder el dinero de los boletos, que no devolvieron. 

Sólo el tiempo dirá la responsabilidad que ha tenido el festival y las autoridades que decidieron seguir adelante, pese a la terrible coyuntura mundial, en la propagación de contagios en el país.