Hace seis días el conocido chef español establecido en Washington DC, José Andrés, llegaba a Lviv, la ciudad ucraniana fronteriza con Polonia, para anunciar que la organización sin ánimo de lucro fundada por él mismo, World Central Kitchen, se ponía a cocinar sin parar para poder distribuir alimentos a los refugiados que huyen del país.

World Central Kitchen nació con el objetivo de alimentar a las personas en situaciones de desastre (estuvo distribuyendo comidas tras el huracán María en Puerto Rico, por ejemplo)  y funciona en asociación con restaurantes colaboradores en la región donde actúa, en este caso, los restaurantes ucranianos, polacos y de otros países cercanos que estos días están acogiendo a miles de refugiados que escapan de la guerra. 

"¿Por qué ponemos a hombres y mujeres jóvenes en esta situación?", dijo en un vídeo publicado en Twitter el lunes por la noche. "No hemos aprendido lo suficiente de los horrores del pasado. Gente, tenemos que alzar la voz contra los líderes que nos están destrozando."

La ONU estima en más de 600 mil el número de personas que han escapado de Ucrania en menos de una semana. La mayoría son mujeres y niños que han cruzado la frontera con Polonia a través de uno de los ocho puntos fronterizos.

We are all Ukrainians right now 🇺🇦 It’s been a long day…but before I go to sleep here’s my message to you… #ChefsForUkraine pic.twitter.com/cumv3NwfUF

— José Andrés (@chefjoseandres) March 1, 2022

"Es duro saber que, incluso en este momento, hay principalmente mujeres con niños caminando durante horas para salir de Ucrania y ponerse a salvo en diferentes países", continuó. Todos los países les dan la bienvenida y todos los países hacen lo que pueden, pero es duro saber que hay gente caminando por las calles o pasando la noche en un coche sin gasolina, sin poder calentarse."

World Central Kitchen, la organización sin ánimo de lucro fundada por  Andrés, tiene experiencia a la hora de salir a repartir comidas en lugares que han sido devastados por desastres naturales. La organización distribuyó comidas después del huracán María en Puerto Rico, por ejemplo.

"Ahora mismo todo el mundo es ucraniano, yo soy ucraniano, el mundo es ucraniano", dice el chef al dueño de uno de los restaurantes colaboradores de Ucrania en otro vídeo. 

Andrés confía que esta ayuda sirva para aliviar un poco "estas horas oscuras" que atraviesa Ucrania, esperando ver pronto "la luz al final del túnel" en que se ha convertido esta tragedia.

Por otro lado, el célebre chef asturiano anunció hace unos días que más de 40 toneladas de ayuda humanitaria saldrían de Madrid hacia el aeropuerto de Rzeszów-Jasionka, en el sureste de Polonia, con material logístico para el establecimiento de cocinas de campaña de World Central Kitchen. 

El cargamento incluye fogones, equipos aislantes para mantener los alimentos calientes, sartenes de tamaño industrial, fiambreras y utensilios de cocina que los voluntarios utilizarán para cocinar.

Hace dos meses, la National Portrait Gallery de Washington anunció su decisión de premiar al chef José Andrés por el impacto que su trabajo ha generado en Estados Unidos. El ámbito de su impacto va extendiéndose.