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Camero aprendió a tocar el tambor a los 4 años y a los 14 ya era un músico profesional. Photo: Washington Post.
Camero aprendió a tocar el tambor a los 4 años y a los 14 ya era un músico profesional. Photo: Washington Post.

La última conga de Cándido Camero

Sus raíces afrocubanas influyeron a numerosos músicos americanos. Los tambores tocan por este fabuloso renovador del jazz, que falleció el 7 de noviembre a los…

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Nacido en La Habana en 1921, este renovador de la conga aprendió a tocar el tambor a los 4 años golpeando latas de leche condensada. 

Su padre trabajaba en una fábrica de embotellado y su tío, que tocaba los bongos, le enseñó todo lo que debía saber sobre percusión e incluso aprendió a tocar el bajo y el tres, un típico instrumento cubano.

A los 14 años y conocido por todos como “Cándido”, el afrocubano ya era un músico profesional que triunfaba en los escenarios bajo la estricta mirada de su padre, que no quería que el chico se desviase de su camino y en cuanto llegaba a casa quería oler su aliento, según recordaba el músico, para cerciorarse de que no había bebido.

Camero pasó por diversos grupos entre los años 30 y 40; actuaba en clubs de jazz, en desfiles callejeros, en la radio, y también formó parte de la orquesta del conocido club Tropicana de La Habana.

Su salto a la fama ocurrió al llegar a Estados Unidos, en 1946, acompañando a un dúo de baile. 

Allí desafió todo lo visto hasta el momento en la escena del jazz, tocando el tambor bajo y el quinto a un mismo tiempo con ambas manos.

Más tarde llegaron las giras con el trío del pianista Billy Taylor, las míticas bandas de Gillespie y Stan Kenton, y su paso como asistente de Ray Charles. Ya instalado en Nueva York, su ritmo no dejaba de evolucionar. 

Su estilo era muy personal. Tocaba tres congas a la vez y las afinaba para llevar la melodía. Se marcó un solo con la orquesta de Kenton, en los años 50’, que dejó al auditorio boquiabierto y entusiasmado. Adaptando sus técnicas a cualquier banda y estilo, a la vez que logró influir en cuantos tocaban con él. 

"Más que ningún otro percusionista latino de su generación, Cándido logró que el sonido del tambor de conga fuera una coloración estándar en las secciones rítmicas de jazz en línea recta", dijo a NYT el profesor de studios chicanos y latinos de la Universidad de California, Raúl A. Fernández.

"Su mayor contribución fue establecer el tambor de conga como un componente integral, si no esencial, del esquema moderno de percusión de jazz y asegurar un lugar para el 'tinte latino' entre los muchos matices rítmicos disponibles para el baterista de jazz moderno", añadió.

Cuando amigos, familiares y fans de Cándido Camero se congregaron para acudir a su servicio conmemorativo, tras haber muerto el pasado 7 de noviembre a los 99 años de edad, el director nominado al Grammy Bobby Sanabria expresó su eterna admiración hacia este verdadero transformador del jazz. 

"Si hablas de percusión, particularmente de la evolución de la conga, estás hablando de dos periodos: antes y después de Cándido", concluyó. "Todos los percusionistas que trabajan hoy en día, en cualquier contexto, tienen una deuda de gratitud con él".