LIVE STREAMING
Photo: Wisconsin Muslim Journal.
Photo: Wisconsin Muslim Journal.

El sincrónico ascenso de Bisha K Ali y Ms. Marvel

El explosivo y trabajoso ascenso de la joven guionista musulmana Bisha K Ali encuentra un eco en la superheroína a la que ahora dará vida en una nueva serie de…

MÁS EN ESTA SECCIÓN

100 años de Truman Capote

Cultura hispana literatura

10 Autores Hispanos

La luna fue volcánica

Un nuevo futuro en la luna.

110 años de Cortázar

Pedro & Daniel

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

Los guionistas de televisión y cómics con el tiempo lentamente interiorizan que es el suyo un trabajo con una cara paradójicamente inenarrable que radica el modo en que se trenza realidad y ficción en sus propias vidas. Cuando empiezas a escribir de un tema puede que lentamente te envuelva, o puede que empleando tus propias memorias para un ejercicio de ficción descubras poderes que no sabías que tenías.

Por ello resuena con ecos sincrónicos la entrevista realizada por Poppy Noor para el periódico inglés The Guardian, en la que la nueva guionista de la serie de Ms.Marvel le explica como en unos pocos años pasó de la subsistencia paupérrima a dirigir la primera serie de un personaje musulmán para el Marvel Cinematic Universe (MCU).

En la pieza narra su evolución desde un apartamento de dos habitaciones en Londres buscando bolos hasta su situación actual de abundante trabajo como guionista en Los Angeles: “Es un trauma experimentar el constante miedo de no ser capaz de sobrevivir. Ahora siento un profundo sentimiento de dicha. Menudo regalo”.

Explicando también su formación autodidacta para aprender a mejorar sus guiones tras la primera y explosiva aparición en Four Weddings and a Funeral y la todavía más exitosa Sex Education, ahora como showrunner de Ms. Marvel se da cuenta de que del modo en que han ido colindando su experiencia y la de la superheroína a la que ahora dará vida: “Ali y yo somo ambas jóvenes mujeres musulmanas de Londres que se esfuerzan en sus respectivas carreras antes de cruzar el charco. Ambas conocemos el precio que las mujeres de color deben pagar por ser prominentes, simplemente por existir en el espacio público”.

El trasfondo dramático de ambas narrativas es que durante los últimos años el sector del cómic ha probado tener uno de los fandoms con más inquina. Han sido numerosas las escisiones de artistas en los últimos años molestos por lo que consideran una agenda islamizadora de los tradicionales tebeos de superhéroes, confundiendo mensajes de la alt-right con el carácter progresista que desde siempre han mostrado firmas como Marvel a través de la inclusión racial e interseccional.

 Por ello, tras otras polémicas debidas a la orientaciones sexual o el color de piel de ciertos personajes del universo arácnido de Marvel, fue considerada como una ratificación de esa apuesta por la inclusión la aparición en 2013 de Kamala Khan. Sucesora del manto de Ms. Marvel, Khan se convirtió así en la primera mujer musulmana en tener su propio cómic.

El universo Marvel es uno de los eventos comerciales más importantes del inicio de nuestro milenio, pura mitología pop que fluye por todas las pantallas del mundo generando millones. Por ello no es de extrañar que decidiera expandirse al mundo de las series con anunciados productos como WandaVision, Loki o la mencionada Ms. Marvel.

Por todo ello, al provenir del mundo de la comedia y el stand-up londinense, parece ser que para protegerse de la lluvia de trolls y la atención que supondrá el lanzamiento de la serie, en el punto de mira más crítico posible como arma arrojadiza en las acusaciones de las guerras culturales, parece ser que Bisha borró varias decenas de tweets potencialmente polémicos, como ya hicieran otros guionistas al firmar con Disney+.

El poder de la joven Kamala Khan consiste en estirarse sin límites y agrandar sus puños. Semejante flexibilidad muestra la también joven Bisha K. Ali en su modesto ascenso que tanto puede representar.