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Obama llegó a la cumbre con el reto de mostra liderazgo

Obama llegó a la cumbre con el reto de mostra liderazgo

Consiguió persuadir a los líderes de aportar 12.000 millones de dólares para seguridad alimentaria.

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El presidente de EEUU, BarackObama, comenzó hoy su participación en su primera cumbre del G-8,
que se celebra en L'Aquila, con el desafío de demostrar su liderazgo
en asuntos tan espinosos como el cambio climático.

Los países más desarrollados del mundo acordaron, en una
declaración sobre el efecto invernadero, limitar a dos grados
Celsius el calentamiento medio de la Tierra, el mismo nivel de antes
de la industrialización del siglo XX.

Para ello, se recortarán las emisiones contaminantes de los
países desarrollados en un 80 por ciento con respecto a los niveles
de 1990 en adelante, según explicaron en un comunicado al término de
su primera reunión.

Estados Unidos acogió la declaración como un triunfo, después de
que en una reunión el martes los países en vías de desarrollo
rechazaran suscribirlo, si bien su principal negociador, Mike
Froman, indicó que "sería equivocado poner toda la atención en este
objetivo, también importa lo que hagamos para 2020 o 2025".

Obama llegaba a la cumbre alentado por su éxito al conseguir un
acuerdo para la firma de un tratado de reducción de armamento
nuclear con Rusia a comienzos de esta semana.

Tras una reunión hoy en Roma con el presidente italiano, Giorgio
Napolitano, Obama destacó la importancia de que la comunidad
internacional trate con países como Irán o Corea del Norte para
intentar persuadirles de que renuncien a sus ambiciones nucleares.

"Es importante que la comunidad internacional pueda hablar con
países como Irán o Corea del Norte y alentarles a dar pasos para no
contribuir a la proliferación nuclear", afirmó.

Pero el ministro italiano de Asuntos Exteriores, Franco Frattini,
afirmó que "por el momento no se dan las condiciones" para una
condena del G-8 a Irán acerca de su programa nuclear y la represión
contra los manifestantes que protestaban contra las elecciones del
12 de junio.

Según explicaron fuentes europeas, Rusia, como ya ocurrió en la
reunión de ministros de Exteriores del G8 en Lecce en junio, no está
dispuesta a respaldar una declaración demasiado dura contra el
régimen del presidente Mahmud Ahmadineyad.

El G-8 sí emitirá una condena contra Corea del Norte, después de
que ese país haya llevado a cabo una serie de lanzamientos de
misiles y en mayo efectuara una segunda prueba nuclear, explicó
Frattini.

Un área donde Obama deberá mostrar también liderazgo es la
economía, en una cumbre que EEUU ve como puente entre las reuniones
del G-20 -los principales países desarrollados y en desarrollo- del
pasado abril en Londres y del próximo septiembre en Pittsburgh
(EEUU).

En el borrador de la declaración final sobre la crisis económica,
el G-8 apunta que la situación económica sigue siendo incierta, a
pesar de los signos de recuperación que se han registrado hasta
ahora.

Pese a "los progresos alcanzados hasta ahora" en la recuperación
de la confianza y la estabilización de los mercados financieros, la
"situación sigue siendo incierta y que sigue habiendo riesgos
significativos para la estabilización económica y financiera",
señala la declaración.

Según explicó Froman, también hubo un "amplio acuerdo" en que los
países empiecen a preparar sus "estrategias de salida" para poner
fin a sus medidas de estímulo económico, aunque coincidieron en que
empezar a aplicarlas ahora sería "prematuro".

El presidente estadounidense ha conseguido asimismo persuadir al
resto de líderes de los países más industrializados y Rusia para que
contribuyan con cerca de 12.000 millones de dólares en los próximos
tres años a una iniciativa de seguridad alimentaria.

Obama dedicó parte de su jornada hoy a recorrer, junto al primer
ministro italiano, Silvio Berlusconi, las ruinas del terremoto que
asoló L'Aquila el pasado abril, que causó más de 300 muertos.

A la cumbre, que concluirá el viernes, están invitados, además de
las mayores potencias económicas, países como México, Brasil o
España.