La diabetes es una de las enfermedades que más muertes causa en Estados Unidos. Según los Centros para el Control y Prevención de la Enfermedad (CDC), más de 30 millones de americanos sufre esta enfermedad. Un problema de salud que ataca de forma muy directa a la población latina. Y es que mientras que el riesgo de sufrir diabetes para un no latino es de un 7,6%, el de la población latina se cifra en un 7,6%.

Pero además, parece que los diabéticos latinos tienen mayores probabilidades de morir de esta enfermedad. La causa de ello podría ser el incorrecto seguimiento de las instrucciones proporcionadas por el médico. Son las conclusiones a las que se ha llegado a través de un estudio realizado por la universidad del Sur de California (USC).

En esta investigación se analizaron las dinámicas de comportamiento de diferentes pacientes diabéticos tratados en diversas clínicas de los Ángeles. Los resultados mostraron una clara diferencia en el seguimiento de los tratamientos. Y es que, mientras la población no latina, seguía las recomendaciones de los doctores, a los pacientes latinos les resultaba más complicado entender el correcto funcionamiento del tratamiento y por tanto, no tomaba los medicamentos como era debido.

Una barrera en el lenguaje

Para los investigadores, los resultados que arrojan este estudio ponen el foco en las barreras que el lenguaje crea, incluso a la hora de tratar una dolencia como esta. Es por ello que abogan por crear una concienciación en torno a este problema y animan a adoptar medidas que minimicen su impacto. Por ejemplo, ayudando a los pacientes a distribuir las pastillas para que sea más fácil entender su posología o asistiéndoles con un traductor.

Alto número de amputaciones

El hecho de que los enfermos de diabetes no sigan las recomendaciones, puede generar que la enfermedad quede fuera de control. En este sentido, cada año se siguen realizando decenas de amputaciones consecuencia del avance de esta enfermedad. Unas cifras nada desdeñables entre las que, de nuevo, vuelve a destacar la presencia de la población latina, ya que sufren más amputaciones que la población no latina.