¿Cuántas veces has oído aquello de que las medicinas deben ser tomadas acompañadas de algún alimento? Es cierto que la ingesta de ciertos medicamentos pueden afectar y dañar nuestro estómago pero también a nuestro hígado, un órgano del que muchas veces nos olvidamos pero que juega un papel importante en nuestra salud.

Los expertos concluyen que todos los medicamentos resultan algo tóxicos para nuestro hígado ya que es este el que filtra los componentes del mismo. Sin embargo, existen algunos fármacos que, debido a su composición, resultan más dañinos. En este sentido, investigadores del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, en México, llegaron a la conclusión de que existen cuatro medicamentos que pueden afectar al funcionamiento del hígado si son tomados en exceso y sin control médico.

Entre ellos se encuentran los analgésicos y los medicamentos antiinflamatorios. Ambos utilizados de forma muy común por la población. Los otros fármacos que completan esta lista son los utilizados para tratar la epilepsia y aquellos que frenan las bacterias causantes de la tuberculosis. Según los expertos, el problema radica en que, los dos primeros fármacos son muy utilizados por la población, que llega incluso a tomarlos sin consultar a su médico. Esta práctica común puede resultar muy peligrosa, ya que el uso prolongado de estos medicamentos puede generar daño en el hígado en todo el sistema digestivo si no se toman correctamente.

Daño hepático por medicamentos

A pesar de que puede parecer inofensivo, automedicarse puede tener serias consecuencias en nuestra salud. Mucha gente decide tomar ciertas pastillas con el fin de ahorrarse una visita al médico. Sin embargo, este hecho puede acarrear importantes consecuencias.

Las personas mayores, mujeres, embarazadas o enfermos del riñón son más susceptibles a sufrir un daño hepático generado por la toma de medicamentos. Fármacos que en principio parecen más corrientes como el paracetamol, pueden llevar a generar esta situación. Según los expertos, no se trata de que se evite la ingesta de estos medicamentos sino que esta se realice siguiendo las recomendaciones de los médicos.