Se acerca el verano y con él llega el buen tiempo, la playa, las noches de verano y… el sol. Amado por muchos y temido por aquellos que han vivido de cerca la experiencia de sufrir algún tipo de problema derivado de los baños de sol.

La luz solar es beneficiosa para nuestro cuerpo. Fija la vitamina D y el calcio en nuestros huesos y nos proporciona alegría. Sin embargo, dependiendo de nuestro tipo de piel, deberemos aplicarnos una loción específica para protegernos. En esta época las revistas y la televisión se llenan de anuncios de bloqueadores solares. Es importante distinguir las diferencias entre ellos y elegir siempre el más apropiado para tu piel.

Pieles con problemas

Si sufres de acné, tienes manchas, pecas o descamación en la piel, es recomendable que utilices productos que contengan una sustancia llamada PABA o oxibenzona (podrás encontrar esta información en la etiqueta) y que evites productos que contengan conservantes y fragancias. Estas sustancias pueden irritar aún más tu piel y crear nuevos problemas. Evita las soluciones más grasas y decídete siempre por fórmulas más ligeras que contengan menos aceite.

Si tomas algún tipo de producto para tratar las afecciones de tu piel, ten en cuenta que es probable que debas evitar el sol para evitar la aparición de otros problemas. Consulta a tu médico antes de disfrutar de un día al sol, puede que necesites resguardarte y quedarte a la sombra.  

Pieles secas

Existen lociones protectoras hidratantes que te ayudarán a reestablecer el equilibrio de tu piel. Elige las texturas ligeras con un extra de hidratación y recuerda que debes echarte crema varias veces al día.

Pieles infantiles

La piel de los niños es una de las más afectadas por el sol. Es fácil que los más pequeños se quemen si su piel no está bien protegida. Por eso, la recomendación de los expertos es echarles crema antes de vestirles y repetir esta acción al menos una vez más a lo largo del día. En cuanto al tipo de cremas, intenta elegir protectores solares de óxido de zinc y dióxido de titano que no contengan compuestos como el PABA y la oxibenzona. Si te resulta complicado convencerles para protegerles del sol, prueba a utilizar protector en spray. De esta manera será más fácil extender la crema.

Aunque no haga sol

Los expertos recuerdan año tras año que los bloqueadores solares deben aplicarse tanto en días soleados como en días nublados e incluso de lluvia. La razón para ello es que los rayos UV también llegan a nuestra piel en días en los que no luce el sol.

Si tienes dudas, consulta con tu médico o tu farmacéutico cuál es la loción protectora más adecuada para tu tipo de piel.