Una encuesta realizada por estudiantes de psicología del Philadelphia Community College concluyó que el 46 por ciento de los estudiantes de esa institución educativa disminuyó el consumo de bebidas gaseosas tras la entrada en vigencia del impuesto a la soda en enero de este año.

El sondeo, realizado entre 1.320 estudiantes mayores de 14 años, también encontró que el 32 por ciento de la población estudiantil reconoció haber salido de la ciudad para comprar bebidas gaseosas en municipios donde el impuesto no tiene aplicación. 

La encuesta fue el resultado de un ejercicio de clase en el que estudiantes de psicología investigaron durante un mes el patrón de consumo de sodas en el alma mater. 

Aunque la encuesta no se publicará en forma oficial, Richard Frei, profesor asociado de la facultad le dijo a Philly.com que el estudio es un análisis independiente sobre impacto del impuesto.

"El objetivo no es convertirnos en activistas sino utilizar la investigación para evaluar", dijo Frei durante la presentación de los resultados este lunes en la universidad.