Estudiantes de la Universidad de Puerto Rico
(UPR) exigieron este jueves al gobernador, Alejandro García Padilla, que elimine
una cuota de 800 dólares de su matrícula que impuso la administración
de la institución educativa.

El grupo de alumnos, miembros de
la Confederación Estudiantil Universitaria, pidió a través de un
comunicado de prensa la eliminación de la cuota que el año pasado desató
una de las más largas huelgas estudiantiles en la UPR.

Según
la secretaria general del organismo estudiantil, Hannan Ortiz, la cuota
forzó la salida de más de 10.000 estudiantes de la UPR "que tenían
acceso a una educación universitaria de calidad y al menor costo
posible".

Ortiz afirmó que el retiro de alumnos "es
preocupante en momentos en que es necesario desarrollar alternativas a
la crisis de violencia que vive nuestro país".

Los estudiantes
pidieron al gobernador García Padilla que tome acción pronto, pues ya
el presidente de la Junta de Síndicos, Luis Berríos Amadeo, ha citado a
una reunión en la que espera que se traten asuntos económicos y
financieros.

Debido a los conflictos que tuvieron los
estudiantes con la Policía, la administración de la UPR suspendió a
varios universitarios, entre ellos, a Roberto Cáez por presuntamente
"ser una amenaza inminente" contra la seguridad de la institución
educativa.

Durante la huelga, la Policía tomó el control de
los accesos a la UPR pocas horas después del fin de la paralización de
dos días provocada por el rechazo de los estudiantes a la cuota.

La entrada de la Policía al campus sanjuanero ha sorprendido dado el
compromiso, no escrito, alcanzado hace años de evitar el acceso de las
fuerzas del orden a la Universidad, cuya presencia en el institución fue
detonante de graves incidentes durante las décadas de los setenta y
ochenta.