[OP-ED]: La mujer que puso al hombre en la Luna
¿Ha oído hablar sobre Margaret Hamilton? Ni yo.
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¿Ha oído hablar sobre Margaret Hamilton? Ni yo. Casualmente encontré esta información: “Margaret Hamilton: la historia jamás contada sobre la mujer que nos llevó a la Luna.”
¿Cómo? Sí, el 20 de julio de 1969, los astronautas del Apolo 11: Neil Armstrong, Edwin E. Aldrich, y Michael Collins llegaron a la Luna. El alunizaje culminó en lo que ha sido el mayor éxito de nuestra especie: astronautas norteamericanos pisaron la superficie lunar. Una mujer, Margaret Hamilton, desarrolló el software que permitió que la misión fuera un éxito en un momento en el que ni siquiera existía esa ingeniería.
Margaret, casada con James Cox Hamilton, científica computacional, matemática e ingeniero en sistemas fue nombrada Directora de la División de Ingeniería de Software para el Programa Espacial Apolo. Llevaba a su hija Lauren los sábados al laboratorio para pasar tiempo con ella, mientras ella, al mismo tiempo, creaba las rutinas que más adelante se añadirían a la computadora del módulo de comando Apolo.
De 1961 a 1963 trabajó en un proyecto donde usaba radares para seguir trayectorias de aeronaves desconocidas. Escribió el código para el Laboratorio de Investigación Cambridge de la Fuerza Aérea norteamericana. Tuvo experiencia de primera mano en una época donde las ciencias computacionales y la ingeniería de software no existían. Su sueldo era menor que el de sus subordinados varones.
Un sueño imposible se convirtió en realidad. En 1965 fue la responsable del desarrollo del software de vuelo a bordo de las computadoras de la misión Apolo en el que trabajaba el equipo del laboratorio, y posteriormente supervisó los desarrollos de la misión de la estación Sky lab.
Margaret Hamilton fue la principal diseñadora de software de vuelo para el Apolo. Incluso, ella acuñó la palabra ‘software’: no existía entonces en los términos computacionales. Margaret estuvo al frente de la División de Ingeniería de Software que desarrolló el equipo para la misión espacial Apolo 11 de la NASA. También desarrolló el software que hizo posible el alunizaje.
Con las limitaciones de esos tiempos, las aportaciones de Margaret y su equipo dieron paso a grandes contribuciones para el futuro de la exploración espacial. Margaret no sólo hizo a mano el código de esta máquina en particular a través de sus trabajos científicos, sino que hizo importantes contribuciones a las ideas sobre la tolerancia a fallos y fiabilidad en los equipos.
El proyecto SAGE se desarrolló para identificar posibles ataques aéreos durante la Guerra Fría: Dice Margaret: “Cuando entré a MIT como principiante, me asignaron un programa que nadie había podido descifrar y menos hacerlo funcionar: era tramposo, y redactado en Griego y en Latín. Nadie pudo descifrarlo.” Pero Margaret sí: no solo lo descifró, sino que lo hizo funcionar. Le ganó una posición en la NASA: Directora del Programa Software para el Proyecto APOLO.
En la NASA, el equipo de Margaret Hamilton implementó una guía de software para navegar y alunizar, y sus múltiples variaciones. No había información al respecto, ni cursos para desempeñar ese cometido tremendamente complicado.
En un momento crítico de la misión Apollo 11 tres minutos antes del alunizaje sonaron varias alarmas en el sistema de la nave. La computadora estaba sobresaturada: ¿Abortar la misión? ¡No! Margaret había incorporado al sistema computacional una guía con varias alternativas que sirvió de base para detectar errores AGC y mecanismos de rescate.
Margaret Hamilton ha recibido muchos premios y reconocimientos: ‘Premio Ausuta Ada Lovclase Award’ por su logro excepcional científico y técnico y el extraordinario servicio a la comunidad informática. 2003: Premio NASA por sus contribuciones científicas y técnicas. El premio más grande otorgado en la historia de la NASA. Gran parte de su trabajo en la NASA consistió en escribir códigos y diseñar sistemas.
Margaret Hamilton, profesionista, esposa, madre, y la mujer que hizo posible que el hombre pisara la luna.
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