El mares 13 de julio, el presidente Joe Biden hizo una parada en Filadelfia para pronunciar un discurso sobre el derecho al voto. Inmediatamente después de las elecciones de 2020, Biden tomó la iniciativa del derecho al voto como tema central de su presidencia. Justo antes de que asumiera el cargo, la nación presenció una insurrección en el capitolio, una elección impugnada en varios estados y una afrenta renovada a los derechos de voto en forma de docenas de proyectos de ley en todo el país.

Sin embargo, la visita de Biden a Filadelfia también funcionó como una forma de tranquilizar a los aliados de que a pesar de que la Ley For the People, H.R.1 está casi pospuesta, la lucha contra estos esfuerzos liderados por los republicanos continuará. En 2020, Biden dijo que fortalecer la ley de derechos de voto sería una de sus prioridades iniciales en el cargo.

En varios estados, incluidos Pensilvania, Georgia, Texas y Arizona, las iniciativas lideradas por los republicanos para restringir los derechos de voto tienen al Partido Demócrata al límite. Un fallo de la Corte Suprema a principios de este mes debilitó una cláusula clave de aplicación de la Ley de Derechos Electorales por segunda vez desde 2013.

En su discurso del martes, Biden dijo que si bien la decisión de la Corte Suprema fue perjudicial, no impide que el Congreso repare el daño.

"Tan pronto como el Congreso apruebe la Ley Para el Pueblo y la Ley de Promoción de los Derechos Electorales de John Lewis, la firmaré y dejaré que todo el mundo la vea", dijo.

Pero ambos proyectos de ley están actualmente estancados.

El HR 1 pasó por la Cámara controlada por los demócratas el 2 de marzo, pero enfrenta una batalla cada vez más difícil en el Senado. Todos los demócratas en el Senado, con la excepción de Joe Manchin (D-WV), apoyan el proyecto de ley sobre el derecho al voto. Ninguno de los republicanos apoya la medida de casi 800 páginas, lo que significa que es poco probable que los demócratas obtengan el apoyo de ninguno sin tener que hacer grandes compromisos.

Es probable que el proyecto de ley no sea aprobado por el Senado, pero ha sentado las bases para las reformas específicas que podrían llevarse a cabo.

Pero el tiempo corre

Al 14 de mayo de 2021, los legisladores de 48 estados han presentado 389 proyectos de ley con disposiciones restrictivas, según el Brennan Center for Justice, que ha estado siguiendo estos esfuerzos.

Además indica que ya se han promulgado al menos 22 proyectos de ley y 31 han pasado al menos en una de las cámaras.

"Si bien este amplio asalto no tiene precedentes", dijo Biden en su discurso, "no solo se dirigen a personas de color. Están apuntando a votantes de todas las razas y orígenes con un objetivo simple. ¿Quién no votó por ellos? Es inconcebible ", añadió..

Biden pidió la creación de una coalición de líderes para plantear la urgencia, pero a medida que estos proyectos de ley continúan avanzando en las legislaturas estatales en todo el país, otros líderes están pidiendo enfoques más directos.

Janet Murguía, presidenta y directora ejecutiva de UnidosUS, le dijo a AL DÍA que la situación es especialmente grave en Pensilvania debido al margen de victoria visto en las elecciones presidenciales de 2020.

“Necesitamos asegurarnos de que existan protecciones federales y estándares nacionales a los que los estados tendrán que adherirse”, dijo.

Esto podría significar dividir la Ley para el Pueblo en disposiciones más pequeñas para obtener una  especie de agenda de derechos de los votantes para avanzar, o tal vez los congresistas demócratas necesitarán ser más contundentes para aprobar la legislación.

Sin embargo, Pensilvania no está en una posición como la de Texas, donde la bancada demócrata esta semana ha roto el bipartidismo y el quórum en un esfuerzo por bloquear varias iniciativas lideradas por los republicanos, incluidos proyectos de ley que podrían intimidar a los votantes en las urnas.

“Cada legislatura es diferente, pero lo que estamos viendo es un patrón entre estas legislaturas lideradas por republicanos, de nuevo, básicamente para hacer más difícil que las comunidades de color y otras que están en comunidades más pobres, voten por correo, eliminando los esfuerzos para votar por correo, para restringir la votación anticipada, y también para limitar los lugares de votación”, dijo Murguía.

En su discurso, Biden recordó las auditorías realizadas a  las elecciones de 2020. Desde Arizona, Wisconsin, Georgia y ahora el intento en Pensilvania, cada uno de estos estados cambió el curso de la elección a favor de Biden.

El margen de victoria, especialmente en Arizona y Pensilvania, habría sido menor sin los votantes latinos. Los movilizadores mexicoamericanos en Arizona fueron los primeros indicadores de la victoria de Biden en Arizona, y en Pensilvania, cuando el estado cambió a azul y finalmente ganaron las elecciones con un estrecho margen.

“Obtuvimos el mayor número de votantes latinos en la historia de los Estados Unidos en esta elección pasada. Según los datos del censo publicados la semana pasada, sabemos que un récord de 16,5 millones de latinos votaron en las elecciones de 2020, la participación más alta que jamás hayamos visto en Pennsylvania ”, dijo Murguía.

El capítulo local de Unidos en Filadelfia, Congreso de Latinos Unidos, entró en detalles sobre los esfuerzos que llevaron a la participación récord.

Desde abogar por materiales educativos y de registro de votantes bilingües, hasta colaborar con socios locales, la vicepresidenta de Asuntos Externos e iniciativas estratégicas, Julia Rivera, dijo que la presión estaba en responder a las nuevas opciones de votación disponibles y para garantizar que los votantes estuvieran “informados y facultados” para ejercer su derecho de voto.

“Congreso ha participado en muchos esfuerzos de participación cívica, específicamente en torno a la votación y las elecciones”, dijo. “El voto es un derecho fundamental protegido por la Constitución y alentamos a los miembros de nuestra comunidad a ejercer su derecho y participar en el proceso democrático”.

Según los datos de Pew Research sobre las elecciones y votaciones de 2020, un número récord de votantes emitieron sus votos por correo en 2020. Esto se convirtió en la norma para muchos debido a preocupaciones por la pandemia, pero para otros, abrió una nueva vía en la accesibilidad.

También encontró que los votantes negros tenían más probabilidades de haber votado temprano en persona, otra vía que se hizo más disponible en respuesta a la pandemia.

Ambas opciones están ahora bajo ataque.

“Tenemos que ampliar los esfuerzos para la  votación por correo y anticipada porque sabemos lo importante que es para los votantes latinos en todo el país y en Pensilvania. Estamos muy preocupados de que el progreso que hemos logrado en estas elecciones pasadas se esté socavando ”, dijo.

Al venir a Pensilvania, donde el estado sigue desempeñando un papel fundamental en el resultado de las elecciones, está claro que Biden conoce lo que está en juego.

El margen de la victoria y lo cerca que estuvo el resultado de las elecciones significa que cada bloque de votantes es importante, y cualquier esfuerzo por sesgar el resultado de las elecciones de manera que afecte desproporcionadamente a los votantes negros y latinos tiene el potencial de cambiar el resultado.

La pregunta es si un discurso es suficiente para movilizar a legisladores con la capacidad de al menos hablar del tema.