LIVE STREAMING
Tráfico humano: el hijo cruel de la pobreza

Tráfico humano: el hijo cruel de la pobreza

De acuerdo con las Naciones Unidas, el tráfico de personas se considera como una de las industrias criminales de mas rápido crecimiento en el mundo.

MÁS EN ESTA SECCIÓN

¿Cuáles son las preocupacion

Protección Temporal

La economía está estancada

Buenas noticias empresarios

Adiós a un 'problem solver'

Combatiendo la adicción

Un problema sin vencimiento

Cultura latina dividida

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

Puede que no sea errado decir que hoy y hasta finales de agosto habrá un grupo de personas que se beneficiaran de un negocio de $2,6 billones a través de otro grupo de personas que en lugar de ser la contraparte, son el producto. El Trafico Humano (TH) “manosea” 32 billones de dólares cada ano, —de acuerdo con las Naciones Unidas— y lo hace con gran éxito.

¿Víctimas? Están por doquier, pero al parecer son difíciles de encontrar. ¿Por qué? Todo es tan misterioso como el mismo negocio. Las organizaciones son reticentes a entregar datos, muy pocos hablan abiertamente. Las estadísticas no se confiesan fácilmente y cuando lo hacen, los números son sorprendentemente bajos. No es fácil obtener testimonios y la definición del fenómeno por parte de algunas organizaciones, es a veces confusa.
De acuerdo con las Naciones Unidas, el tráfico de personas se considera como una de las industrias criminales de mas rápido crecimiento en el mundo. Este crimen hace que hombres, mujeres y niños, a menudo motivados por sus sueños y la esperanza de mejorar sus condiciones de vida, se sometan a explotaciones de todo tipo; muy similar a la esclavitud. De hecho, algunos definen este fenómeno como una forma de esclavitud moderna.

De acuerdo con las cifras de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) más de 20 millones de personas se ven obligadas a realizar trabajos forzados a nivel mundial, incluida la explotación sexual; de ellos, 1,8 millones se encuentran en América Latina y el Caribe.

Las Naciones Unidas advierten en su último informe (2014) que el número de condenas a nivel mundial se ha mantenido muy bajo. “Al rededor del 40 por ciento de los países reportaron menos de 10 condenas en un año. Un 15 por ciento de los 128 países incluidos en este informe, no registraron una sola condena”. A pesar del silencio como resultado de una pobre intervención, el número de niños que han sido víctimas, particularmente niñas menores de 18 años, ha aumentado, así como el número de personas de trata para trabajo forzado.

Sorpresivamente y de acuerdo con el mismo informe, el 30 por ciento de los países que proporcionaron información sobre el género de quienes trafican, las mujeres constituyen la mayor proporción de los traficantes. “En algunas partes del mundo, las mujeres trafican con mujeres. Esa es la norma”. Qué pena.

 

Un vistazo a Filadelfia

El Centro de Recursos del Tráfico Humano, NHTRC, por sus siglas en inglés, muestra una Pensilvania tímida en el medio entre California que reporta 223 casos y Oregon con 13. Pensilvania reportó 26 casos en marzo de 2015.
Filadelfia creo el NHTRC, la Coalición Contra el Tráfico, en 2005. Son 56 miembros “aproximadamente” y Al Día conversó con cuatro de ellos: Centro Nacional de Ayuda, NSC (por sus sigla sen inglés), HIAS, el Ejercito de Salvación (Salvation Army), y la policía. Aunque lo hacen lo mejor que pueden, queda un amargo sabor de pasividad. Con un negocio tan lucrativo y doloroso, con un chance tan reducido de la víctima para buscar ayuda, las organizaciones deberían aumentar su conexión con la comunidad. El dicho bien reza, “Si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma”.

El pasado mes de diciembre fue emitida la Directiva 155. “No es otra cosa que la política de intervención de la Policía frente al problema”, dijo el Capitán John Darby, oficial al mando de la Unidad Especial de Victimas, (SVU por sus siglas en inglés). Fue la unidad que se nos fue asignada por asuntos públicos de la Policía para indagar sobre este tema en particular. Esta directiva no solo define el problema, también aclara como proceder.

Su definición incluye tres tipos de TH, para el trabajo, de servidumbre por deudas y el sexual. La directiva es clara a la hora de definir quiénes están en mayor riesgo: “Niños fugitivos y sin hogar, personas que han sido física o sexualmente abusadas en el pasado, refugiados, personas que viven en EE.UU. con el objetivo de mantener a sus familias en sus países de origen, los trabajadores migrantes y las personas con problemas de salud mental o discapacidad intelectual”.

La división de SVU no maneja casos de tráfico sexual o laboral. “Nosotros solo hasta ahora somos más conscientes del problema. Sabemos que existe. Hemos visto explotación sexual, pero en mis 30 años de experiencia no he visto trafico laboral o con fines domésticos”, dijo el Capitan Darby durante nuestra conversación.

Mientras tanto, Judith Bernstein-Baker, Directora Ejecutiva de HIAS Pennsylvania fue enfática: “El Tráfico Humano es la segunda mayor fuente de ingresos de una empresa criminal después de las drogas”.

No hace mucho, este mismo diario hizo una breve investigación sobre las condiciones laborales de los inmigrantes asiáticos en la ciudad, en comparación con los latinos. No necesitamos mucho para conectarnos con la victima, un poco de ayuda aquí y allá, hicimos preguntas y nadie nos dio nombres pero encontramos lugares y víctimas.

Sabemos también que muchas granjas del Estado de Pensilvania dependen de los trabajadores migrantes, muchos de ellos mexicanos o haitianos. Es por esta razón que la Oficina de Granjeros de Pensilvania argumenta que una de sus prioridades es la reforma migratoria. Es bien sabido también que la mayoría de los agricultores protegen a los inmigrantes, los ayudan y que son ellos parte de los que apoyan la ley de reforma S744.

 

Estadísticas y casos

HIAS reporta entre 5 y 10 casos por año, además de los casos de niños cuando la policía detiene al traficante. “No sabemos cuántas personas están ahí fuera con miedo de reportar. El número es pequeño y no debería ser una sorpresa que sea pequeño, son pocos los que saben cómo salir de esa situación”, dice Elizabeth Yaeger, Fiscal Supervisora del Proyecto de la Juventud de HIAS. NSC, reporta 45 casos individuales de trabajo desde 2009; NHTRC los refiere y los otros son quienes entran a NCS en busca de ayuda y que pueden caer en esta categoría. NSC es una de las pocas organizaciones que ha comenzado a acercarse a la comunidad. No obtuvimos estadísticas de Salvation Army.

Algunos de nosotros, dudo que seamos muchos, hemos visto muy pequeños avisos alertando y ofreciendo ayuda en las paredes de algunas líneas de metro y en estaciones de tren.  No son más grandes de 20 por 8 pulgadas, son muy difíciles de leer debido al tamaño y están escritos sólo en inglés. Estos avisos están también en algunos baños (al menos de mujeres) de las organizaciones sin fines de lucro.
Como muchas veces pasa, estamos muy atrás de la realidad.

Los flujos de tráfico en la región se detectan principalmente en los países ricos del Medio Oriente, Europa Occidental y América del Norte. Estos flujos implican a menudo víctimas de la región sur, principalmente del este y el sur de Asia y el África subsahariana.

Por lo general hay un tercero en este negocio cuya tarea principal es la de ponerse en contacto con la víctima. Ofrecen el sueño de venir a Estados Unidos y aunque los clientes a veces no son muy ingenuos, los reclutadores saben muy bien lo que hacen. Ellos actúan y saben decir lo que las personas necesitan: una afirmación de que experimentaron la misma situación pero que al final resultó genial. Tienen un muy buen guion que se basa en la empatía, “entendemos que usted tiene dudas, pero todo va a ser grande”.

El Instituto Urbano reporta que el reclutador gana 6.000 dólares por persona.

Chris Setz-Kelly, Staff Attorney de NSC, reafirmo este número, “entre 5 a 10 mil dólares por persona y reclutan cientos. Los reclutadores son del país de las víctimas. Con la servidumbre doméstica es un poco diferente. El traficante identifica a alguien que en el país de origen tenga muy poca conexiones familiares y les ofrecen llevarlos a los Estados Unidos para trabajar con familias del mismo país, posiblemente de la misma etnia para ayudar a niños pequeños”, dijo.

Supimos de un caso en el que una mujer se salvó gracias a un vecino quien se dio cuenta que la mujer trabajaba para una familia pero que nunca salía. Aprovechaba a hablar con ella cuando sacaba la basura. Él organizó un plan para que ella escapara y cuando llegó la oportunidad de hacerlo, su coche estaba esperando estratégicamente. “No todas las historias tienen un final feliz”, dijo uno de nuestros entrevistados.

Otro entrevistado recordó un caso ocurrido hace mucho tiempo de una mujer que venía de México. Se le dijo que iba a venir a trabajar y terminó en una casa obligada a trabajar como prostituta. Ella estaba encerrada en la casa y los hombres eran quienes la visitaban; quedó embarazada y fue con esa motivación que se escapó y buscó a alguien que hablara español. Le informó a la policía, se le concedió una visa, y ella termino yendo a la universidad y “ella está muy bien”.

“El sensacionalismo ha ayudado al movimiento porque las personas son mas conscientes que antes”, dijo Jamie Manirakiza, Director of Anti Trafficking and Social Programas.  “Sin embargo, el sensacionalismo no le ha permitido a la gente entender el problema de una manera integral”.

Intervención

La doble moral está en todas partes. El Departamento de Estado le dio a varios países calificaciones más favorables por ninguna “razón santa” en su informe anual publicado el 27 de julio de este año. Malasia, por ejemplo, que es un actor clave en las negociaciones comerciales del Tratado Trans-Pacífico, pasó del rango 3 en su calificación de la lista negra a 2; a pesar de que los análisis de los expertos han dicho que el país no ha mejorado realmente en sus esfuerzos contra el Tráfico Humano.

La Directiva 155 del Departamento de la Policía le sugiere 16 preguntas a los oficiales para interactuar con las víctimas. La número 15 pregunta por el pasaporte o por una tarjeta de identificación válida. Y es aquí donde viene el problema para los inmigrantes. La Fuerza de Inmigración y Control (ICE) es una de las organizaciones que se describe a sí misma como “serias en acabar con la trata de personas”, pero ese compromiso a veces puede traspasar “fronteras”.

“Las cosas pueden suceder rápidamente antes de que intervengamos. Y creo que la gente sabe sobre la comunidad de inmigrantes. Por ejemplo, si la Policía incursiona en un salon de masajes y se encuentran con personas que viven allí y si hay una situación de trata, no van a referir a la gente necesariamente a los proveedores de servicios de emigración. Puede ser que los entreguen a ICE. ICE puede deportarlos”, dijo Bernstein-Baker
Calles, hoteles y moteles, paradas de camiones, servicios de compañía por internet, sitios web en línea (como backpage.com y craiglist.com), prostíbulos, casas de masajes, campamentos migrantes, restaurantes. La trata puede ocurrir dentro de numerosos lugares, y los traficantes pueden ser mujeres, familiares de la víctima, proxenetas, pandillas, contrabandistas y empleadores en negocios legítimos.

Para las Naciones Unidas, el bajo número de datos reportados es sólo la punta del iceberg. Sin respuestas más agresivas de la justicia y sin estrategias para conectarse con la comunidad, la trata de personas seguirá siendo un negocio altamente lucrativo para los criminales y con muy bajas estadísticas en favor de las víctimas.

Sería ideal poder contener desde el país de origen a quienes se exponen de manera ingenua a ser un producto de mercadeo, sin embargo, es la crueldad de la pobreza y la falta de oportunidades la que los empuja. Al ser incapaces de resolver estas y otras crueldades en su origen, solo nos queda la intención decidida de conectarnos con sus víctimas para ofrecerles una segunda y más justa oportunidad. No solo porque con ellos viene el ovillo de información, también porque es socialmente justo tenderles una mano a quienes son víctimas del daño colateral de los países industrializados.