LIVE STREAMING
Fota: Samantha Madera / AL DÍA News

La aprobación del derecho al permiso por enfermedad: “Una cuestión tanto moral como política”

Ayer, en una audiencia maratónica de tres horas, la Comisión sobre la salud del Consejo municipal escuchó los testimonios de más de ocho grupos de empleados…

MÁS EN ESTA SECCIÓN

Trump promete y cumple

Alerta de misiles de Rusia

Musk y el recorte de gasto

¡Misil intercontinental!

EEUU Prohíben Viajes

Impuestos para los más ricos

Rusia: tensiones nucleares

Las "inundaciones del siglo"

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

Ayer, en una audiencia maratónica de tres horas, la Comisión sobre la salud del Consejo municipal escuchó los testimonios de más de ocho grupos de empleados municipales y líderes empresariales sobre el Proyecto de ley a favor del derecho del permiso por enfermedad. La sesión produjo como resultado la aprobación unánime de impulsar dicho proyecto de ley. 

El primer testimonio fue de Everett Gillison, jefe de personal de la oficina del alcalde. A pesar de la muy bien documentada oposición del Alcalde Nutter al proyecto de ley, que se presentó por primera vez en Filadelfia en 2008, Gillison expresó su apoyo entusiasta al derecho de permiso por enfermedad. La palabra clave aquí es “derecho”. Una hora acumulada por concepto de pago por permiso de enfermedad por 40 horas de trabajo equivale a un total de cinco días por año—eso sería lo que los empleadores estarían obligados a dar a sus empleados si el proyecto de ley es aprobado.

La mayoría de los grupos, conformados por entre una y tres personas cada uno, mostró su apoyo firme. La primera mitad de la audiencia estuvo inundada de investigaciones amplias y evidencia anecdótica variada que respaldaba la necesidad del permiso por enfermedad remunerado.

“Los trabajadores de bajos ingresos, las personas de color, y mujeres se ven afectadas de forma desproporcional por la ausencia de un mandato que exige la remuneración del permiso por enfermedad”, dijo Natalie Levkovich, directora ejecutiva de la Federación de la Salud de Filadelfia, quien participó en el tercer grupo. “Quienes no cuentan con el permiso por enfermedad remunerado se ven obligados a tomar decisiones imposibles”. 

Entre los otros ponentes se encontraba Khalid Pitts, propietario de restaurante de Washington D.C., en donde el derecho al pago de permiso por enfermedad ya ha sido promulgado. Pitts dijo que su negocio ha mejorado desde que la ley entró en vigor, y que los empleados han mostrado mayor interés en trabajar para él.

Fatima Hassan dirige una pequeña guardería de niños en la sección de Overbrook de Filadelfia. Ella le ha estado ofreciendo a sus empleados el pago de permiso por enfermedad no solo por motivos de salud sino “por respeto a ellos como seres humanos”.

Los empleados de restaurantes también se pronunciaron respecto a algunas de las exigencias draconianas de la industria de los servicios. Según el consejal Bill Greenlee, las quejas de los empleados de la industria de los servicios fueron las que escuchó con más frecuencia durante el transcurso de los años en que se diseñaba el proyecto de ley. Jason McCarthy, quien ha trabajado en restaurantes de Filadelfia durante 23 años, dijo que no había tenido más opción que trabajar mientras padecía algunos de los síntomas más difíciles –desde huesos rotos hasta diarrea. Los críticos del proyecto de ley atestiguaron en nombre de la Cámara de comercio de la urbe de Filadelfia y su área metropolitana, la Asociación de hotelería de Filadelfia, y la Asociación de restaurantes y alojamiento de Pensilvania. Ninguno dijo que estaba en desacuerdo con el proyecto de ley. Dan Calista, fundador y director ejecutivo de Vynamic, lo calificó varias veces como un proyecto de ley “bien intencionado”. Sin embargo, todos expresaron su interés en adaptar el proyecto de ley lo más posible a las diferentes necesidades, antes de aprobarlo.

A las preocupaciones expresadas por la Cámara de comercio en cuanto a que el proyecto de ley ahuyentaría los negocios de la ciudad, la consejal Marian Tasco respondió que, cuando la municipalidad quería prohibir que se fumara en los restaurantes, las personas dijeron que nadie iría, en vez, a comer a los suburbios. Y no lo hicieron. En cuanto a las preocupaciones de la Asociación de hotelería de que el proyecto de ley constituiría un desincentivo para el sector de hotelería en la ciudad al ocasionar la caída del servicio, Tasco citó que en Filadelfia nunca ha abierto un hotel sin contar con varias exenciones fiscales. 

En cuanto a la aseveración sesgada en general de que las personas se aprovecharían de las condiciones vagas del proyecto de ley a favor del derecho al permiso por enfermedad, Greenlee recordó a todos que le preocupa más que los empleadores se aprovechen de sus empleados.   

En el último grupo, Helen Gym calificó la cuestión del pago de permiso por enfermedad como “una cuestión tanto moral como política”.

El Consejo municipal escuchará la presentación del proyecto de ley en su próxima sesión del consejo municipal que se celebrará el jueves.