Mariela Castro, hija del presidente Raúl
Castro, espera que la Conferencia Nacional del Partido Comunista de Cuba
(PCC, único) ayude a desbloquear el proyecto de ley sobre los derechos
de transexuales y homosexuales impulsado por el Centro Nacional de
Educación Sexual (Cenesex) que ella dirige.

"Confío en que la
Conferencia del Partido ayude a definir explícitamente una política de
no discriminación por orientación sexual e identidad de género y que, a
su vez, ayude a desarticular los prejuicios que obstaculizan su
aprobación", dijo Mariela Castro en una entrevista al portal "CubaSí"
divulgada este lunes.

La directora del Cenesex hizo esas
consideraciones al ser preguntada por el anteproyecto de ley que pide
modificar el Código de Familia cubano para legalizar las uniones entre
homosexuales, entre otros derechos.

En estos momentos, según
Mariela Castro, la iniciativa está en estudio por parte de especialistas
del Ministerio de Justicia y de expertos de la Unión Nacional de
Juristas de Cuba con la previsión de que se incluya en el plan
legislativo de 2012.

Desde hace varios años Mariela Castro promueve proyectos de reformas legales en la isla a favor de las minorías sexuales.

En 2008, el Gobierno cubano aprobó por resolución ministerial las
operaciones de cambio de sexo, pero no ha habido mayores avances dentro
del Parlamento de la isla para las reformas al Código de Familia.

También en alguna ocasión la directora del Cenesex ha solicitado al
Partido Comunista que en sus filas no exista "discriminación" hacia los
homosexuales.

El PCC celebrará el 28 de enero su primera
Conferencia Nacional para revisar sus métodos de trabajo, en una reunión
que ha generado expectativas por la posibilidad de que puedan decidirse
cambios o directrices tendentes al relevo generacional que reclamó Raúl
Castro en el VI Congreso del partido celebrado en abril de 2011.

Sin embargo, el propio presidente cubano y primer secretario del PCC
rebajó las expectativas en torno a la cita al comentar a periodistas la
semana pasada que "no hay que hacerse tantas ilusiones" con la
conferencia al tratarse de una "cuestión interna" de la organización.

El documento base de la Conferencia divulgado en octubre incluye la
propuesta más novedosa que Raúl Castro hizo en el Congreso de abril: la
limitación de los mandatos políticos y estatales de Cuba a un máximo de
diez años, así como "proyectar la renovación paulatina en los cargos de
dirección".

Sobre este aspecto se pronunció, en
declaraciones a los medios, el presidente del Parlamento cubano, Ricardo
Alarcón, quien opinó que "la renovación es absolutamente indispensable
en todo en la vida, absolutamente en todo".