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Cecilia Vicuña, Autobiografía (Autobiography), 1971. Oil on canvas, 23 1/2 × 25 1/4 in. (59.7 × 64.1 cm). Collection Museum of Contemporary Art San Diego, Museum purchase, Elizabeth W. Russell Foundation Fund, 2019. Photo: Matthew Herrmann, courtesy the artist and Lehmann Maupin, New York, Hong Kong, Seoul, and London. © Cecilia Vicuña
Cecilia Vicuña, Autobiografía (Autobiography), 1971. Photo: Matthew Herrmann, courtesy the artist and Lehmann Maupin, New York, Hong Kong, Seoul, and London. © Cecilia Vicuña

El Guggenheim acoge la primera exposición individual de Cecilia Vicuña

El museo inaugura este viernes la primera retrospectiva dedicada a esta reconocida artista conceptual chilena residente en Nueva York desde hace cuarenta años.

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La artista de origen chileno Cecilia Vicuña (Santiago, 1948) suele definirse como "poeta de la precariedad". Su diversidad de obras -pinturas, textiles, libros, performances, películas- entrelazan el lenguaje, la espiritualidad, la política progresista y la antigua cultura andina. 

Residente en Nueva York desde 1980, Vicuña fue galardonada recientemente con el León de Oro a la Trayectoria en la 59ª Exposición Internacional de Arte de la Bienal de Venecia. Y ahora, por fin, el Guggenheim presenta la primera retrospectiva de la artista en un museo, "Cecilia Vicuña: Spin Spin Triangulene", en su ciudad de adopción. 

Esta exposición, que se inaugurará este viernes, 27 de mayo, mostrará la producción artística de Vicuña desde finales de los años 60 hasta la actualidad, y presentará la amplitud de su práctica multidisciplinar, incluyendo pinturas, obras sobre papel, textiles, películas, una instalación de Quipu (palabra quechua para "nudos") específica para el lugar, y una actuación única de un Quipu "en vivo", encargada por el Círculo Latinoamericano del museo.  

Los "Quipus" , para los lectores que desconozcan el término, eran un sistema de registro, contabilidad y envío de mensajes consistente en cuerdas de lana o de algodón de diversos colores, provistos de nudos, usado por las civilizaciones andinas. 

La exposición también incluirá nuevas pinturas y obras sobre papel creadas específicamente para esta presentación. El título, Spin Spin Triangulene, es una creación poética basada en nuevos descubrimientos científicos que la artista relaciona con la rotonda en espiral del Guggenheim y el quipu, para subrayar la conexión entre la ciencia y el conocimiento indígena que Vicuña ha observado desde su temprano encuentro con la cibernética como joven estudiante en Chile. Esta es la primera exposición individual de la obra de Vicuña en un museo neoyorquino y atraerá la atención nacional e internacional sobre una artista latinoamericana pionera.

A lo largo de su trayectoria, Vicuña ha explorado los temas de la memoria, el lenguaje, la ciencia y la espiritualidad y el conocimiento indígena a través de su práctica. Crecí en un periodo increíble, donde parecía que había paz y el deseo de justicia era creciente desde muchos sectores. Luego vinieron los años de la gran liberación social, cultural y política. Fui parte también de esa revolución, del sentimiento y de la forma de ver el mundo", dijo a EFE tras ganar el galardón en la Bienale.

"Crecí en una casa llena de libros y en el campo, como una niña silvestre. Me di cuenta que era indígena, primero por la sensibilidad, por la simpatía y empatía con la belleza del mundo indígena. Siempre me pareció que era más bello, que las personas se comportaban con otra dignidad", añadió la artista, de 73 años.

Sus primeras pinturas figurativas, expuestas en la muestra del Guggenheim, fueron concebidas como un acto descolonizador para subvertir la tradición petrolera impuesta a la cultura indígena por la conquista europea. Estas obras entrelazan su biografía con la historia del ascenso del socialismo. Tras el golpe militar chileno de 1973 que dio paso a la dictadura de Augusto Pinochet, Vicuña se autoexilió en Londres y el activismo político de su arte se intensificó, los iconos e influencias revolucionarias -que van desde Karl Marx, la cantante folclórica chilena y activista social Violeta Parra, y el arte popular andino, el animismo y el indigenismo, que habían sido durante mucho tiempo sus temas- se convirtieron en símbolos conmovedores de lo que estaba siendo atacado. Además, se expondrán los textiles, películas y obras sobre papel de Vicuña, las llamadas Palabrarmas o "armas de palabras", que son acertijos y poemas metafóricos y políticamente comprometidos que muestran su concepción del lenguaje como una entidad viva.

A mediados de la década de 1960, Vicuña inició su serie Quipu, esculturas blandas hechas con hebras suspendidas de lana anudada y sin hilar, a veces combinadas con objetos encontrados. El khipu (nudo) , concebido para transmitir una compleja información narrativa y numérica, fue abolido por los colonizadores europeos. Vicuña reimagina sus Quipus como una respuesta poética contra las disparidades culturales, ecológicas y económicas.

Cecilia Vicuña, La mulata costeña de Colombia, 1977. Photo: Matthew Herrmann, courtesy the artist and Lehmann Maupin, New York, Hong Kong, Seoul, and London. © Cecilia Vicuña
Cecilia Vicuña, La mulata costeña de Colombia, 1977. Photo: Matthew Herrmann, courtesy the artist and Lehmann Maupin, New York, Hong Kong, Seoul, and London. © Cecilia Vicuña

 

Como parte de esta exposición, la artista presentará un Quipu en tres partes, Quipu del exterminio / Extermination Quipu (2022), instalación que representa la vida, la muerte y la resurrección como una llamada a la acción para detener la extinción de las especies de la tierra y la pérdida de la diversidad biocultural. La performance Quipu "en vivo" de la artista es una ceremonia participativa de curación colectiva que conecta la memoria antigua y la cultura contemporánea, invitando a los visitantes a participar activamente en el cambio poético y político de nuestro mundo.

"Corresponde al arte abrir emociones, sentimientos, visiones, hacerlas asequibles. Que formen parte de la vida cotidiana, como sucede en las sociedades indígenas. Ahí siempre hay rituales donde todos se convierten en artistas, bailarines, músicos. Necesitamos esa capacidad de vivir, de ser el arte", dijo a EFE.