Tras semanas de redacciones secretas y en privado, el Senado ha hecho público el borrador de la American Health Care Act (Ley de Atención Médica Americana), una versión de la propuesta de la Cámara del mes de mayo, que pareciera hacer de la atención médica un lujo al alcance de algunos pocos.

La propuesta de 142 páginas está siendo impulsada por el líder de la mayoría republicana, Mitch McConnell, para que sea sometida a voto la semana que viene, dándole tan sólo pocos días a los senadores para tomar su decisión.

Entre los planteamientos de la nueva propuesta se encuentra la remisión del mandato individual del Obamacare, recortando el apoyo federal a Medicaid y eliminando los impuestos de que planteaba la medida previa sobre los ricos y las compañías de seguros, una campaña que han abanderado los Republicanos durante mucho tiempo.

Asimismo, la propuesta plantea retirar los fondos a Planned Parenthood y los recortes se enfocan sobretodo en Medicaid y en la reforma del proceso para recibir fondos federales, incluyendo la introducción de requerimientos laborales.

Sin embargo, y según reportó NBC News, algunos componentes clave del Obamacare se mantendrán sin cambios, como la protección a individuos con condiciones preexistentes y los adultos (hasta los 26 años) podrán mantener la cobertura del seguro de sus padres.

Asimismo, la medida mantendrá el mercado individual y el seguro por créditos de impuestos basados en ingresos, evitando así las penalizaciones.

En cuanto a los impuestos a los ricos, el impuesto sobre ingreso para quienes ganan más de 250.000 dólares al año, será revocado en el 2022, pero un impuesto del 3% sobre el ingreso de inversión será revocado de manera retroactiva.

De la misma manera, la propuesta mantendrá pagos reducidos de costos repartidos durante el año 2019, pagos que ayudarán a los americanos con bajos ingresos a obtener cobertura médica en el mercado individual a través de deducibles y copagos, lo que afectaría directamente la economía de estos estratos.

Otra de las medidas de la ley será el permitir a las aseguradoras aumentar los costos para las personas a medida que envejezcan, otorgando permisos en algunos estados para cubrir menos servicios.

Según el análisis de The Atlantic, la nueva ley también aumentará los costos en las coberturas cambiarias y será menos “comprensiva” en cuanto a las personas de bajos ingresos, enfermas y adultos mayores.

Durante la mañana de hoy, los senadores Republicanos escucharon la presentación de la propuesta en el Capitolio, en una medida de McConnell por lograr convencer a los dudosos de su voto, pues tan sólo puede darse el lujo de perder dos votos de manera de que la medida sea aprobada.

A pesar de que los líderes Republicanos han asegurado que algunos cambios podrían aún ser introducidos, algunos senadores no han estado contentos con el resultado, entre ellos el Senador Republicano de Wisconsin Ron Johnson.

De la misma manera el Líder Demócrata del Senado, Chuck Schumer declaró en el suelo del Senado que “la manera en la que esta ley recorta la seguridad social es cruel. El Presidente dijo que la ley de la Cámara es malvada. Pero la propuesta del Senado podría ser peor”.

Según los analistas, de ser aprobada, la nueva ley afectará de manera importante los niveles de salud y la estabilidad económica de la clase media y baja, sobretodo para quienes no alcanzan al sueldo mínimo y para quienes cuentan con un cuadro clínico en desarrollo.

Pero el logro de los Republicanos será el mismo: desterrar al odiado Medicaid.