Los demócratas le llaman “acto de patriotismo”, mientras los Republicanos les acusan de negacionistas cuando de emergencia en la frontera se trata.

De una u otra manera, la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, aprobó este lunes una resolución que pretende suspender la supuesta Emergencia Nacional declarada por el presidente Donald Trump para desviar fondos del Departamento de Defensa hacia la construcción de su muro fronterizo con México.

Tras su intento fallido de conseguir dinero a través del Congreso para cumplir su principal promesa de campaña, Trump recurrió a una medida que sortea la decisión de los legisladores y busca conseguir dinero de otra parte para seguir con su plan.

Sin embargo, los demócratas en la Cámara introdujeron una resolución para suspender su declaración, mientras al mismo tiempo una coalición de estados introducían una demanda contra la Administración intentando conseguir lo mismo.

El día lunes, la Cámara votó 245-182 a favor de la resolución, contando con el apoyo de trece republicanos, y la medida pasará ahora al Senado para ser debatida.

Aún cuando el Senado cuenta con una mayoría republicana, y a pesar de que el líder de la mayoría, Mitch McConnell, ha asegurado apoyar rotundamente la decisión presidencial, varios analistas estiman que la resolución podría obtener los votos necesarios para ser aprobada, pero no los suficientes como para superar un veto presidencial.

Senadores Republicanos como Lisa Murkowski de Alaska, Thom Tillis de Carolina del Norte y Susan Collins de Maine han insinuado que votarán contra la Emergencia Nacional de Trump, según reportó The Guardian.

“Me ha preocupado cada vez que un presidente, sea republicano o demócrata, se mueve más allá de lo que la mayoría consideraría como sus autoridades”, declaró Murkowski.

Otros republicanos han hecho eco de las preocupaciones de la senadora, agregando que la decisión de Trump “marcaría un peligroso precedente”.

Incluso el vicepresidente Mike Pence recurrió a una reunión a puertas cerradas con varios miembros del Congreso el día martes para manifestar su preocupación, según explicó la BBC.

Por su parte, la líder demócrata en la Cámara, Nancy Pelosi, declaró que “el asunto no se trata de partidismo, sino de patriotismo”.

“Seríamos delincuentes en nuestros deberes si no nos resistiéramos, si no nos defendiéramos para anular la declaración del presidente”, agregó.

Desde el día lunes, Trump ha hecho de las suyas en Twitter, ejerciendo presión sobre los republicanos a quienes sugirió “ser fuertes e inteligentes”, y ha asegurado que, de ser aprobada la resolución, recurrirá al veto para mantener su declaración.

De ser este el escenario, el presidente sufrirá una importante vergüenza política al perder el respaldo de parte de su partido, y el caso pasará a las cortes para ser resuelto.