Una multitud aclamó este sábado el
desfile
por el centro de Buenos Aires de 5.000 miembros de las Fuerzas
Armadas y de seguridad dentro de los festejos del bicentenario de la
revolución que abrió paso a la independencia argentina.

El
desfile militar, el más imponente que se hace en Argentina
desde que en 1983 el país recuperó la democracia luego de siete años
de dictadura, incluyó a regimientos históricos con vestimentas de
época y unidades que libraron la guerra de 1982 con el Reino Unido
en las islas Malvinas, cuya soberanía está en disputa desde 1833.

En
el desfile además participaron pequeñas dotaciones de Brasil,
Bolivia, Paraguay y Venezuela.

Arropados por el aplauso de
decenas de miles de personas que
agitaron banderas argentinas, los militares entonaron las marchas y
consignas de sus respectivos batallones.

Se esperaba que el acto
lo encabezara la presidenta argentina,
Cristina Fernández, pero fue el jefe del gabinete, Aníbal Fernández,
quien ordenó el comienzo de la parada militar desde un palco en la
avenida 9 de julio, en el centro de la ciudad, junto al "Paseo del
Bicentenario" de casi un kilómetro de largo.

"Los argentinos
tienen que convencerse de que en estos 200 años
pasaron muchas cosas y queda mucho por hacer todavía", declaró el
jefe del gabinete, quien compartió el palco con ministros,
gobernadores provinciales y representantes de delegaciones
extranjeras.

Las malas condiciones climáticas impidieron que el
desfile fuera
sobrevolado por aviones de entrenamiento y combate de la Fuerza
Aérea, a quienes los argentinos reconocen su valentía en la batallas
que libró en desventaja con los británicos en la guerra de las
Malvinas.

"Gloria a los 649 héroes de las Malvinas", decía un
cartel
enarbolado por un grupo de veteranos de la guerra con los británicos
en homenaje a los soldados argentinos muertos durante el conflicto.

El
desfile de los militares fue seguido por otro de unas 3.000
personas movilizadas en delegaciones de las 23 provincias del país
con trajes típicos, comparsas, bandas musicales y carrozas.

La
delegación de la norteña provincia de Jujuy, vecina a Bolivia,
desfiló junto a un rebaño de llamas, ganado típico de las tierras
andinas.

El "Paseo del Bicentenario", inaugurado el viernes por
Fernández,
incluye 72 puestos de comidas típicas tanto argentinas como de las
colectividades española, italiana y francesa, entre otras de la
fuerte corriente de inmigrantes que nutrió a Argentina entre fines
del siglo XIX y comienzos del XX.

Los festejos, que durarán hasta
el martes próximo, cuando se
cumplirán 200 años de la Revolución del 25 de mayo de 1810 que dio
paso a la independencia del país en 1816, dispararon la demanda de
pasajes tanto hacia Buenos Aires como hacia centros turísticos,
indicaron fuentes del sector a la prensa local.

Las empresas de
autobuses debieron reforzar los servicios a
Buenos Aires, a balnearios del sureste de la capital argentina y las
serranías del centro del país, cuya capacidad hotelera se colmó
entre el 70 y el 80 por ciento, aseguraron.

El cantautor
argentino León Gieco oficiará hoy por la noche un
concierto de homenaje a la música latinoamericana, al que asistirán
el cubano Pablo Milanés, el brasileño Gilberto Gil, el uruguayo
Jaime Ross, la colombiana Toto La Momposina y el grupo chileno Los
Jaivas, entre otros.

Se calcula que unas 200.000 personas
asistieron el viernes a la
inauguración del "Paseo del Bicentenario" y el posterior concierto
de homenaje al rock nacional que amenizaron Gieco, Lito Nebia, Fito
Páez y Moris, así como la banda Los ratones paranoicos, entre otros
artistas.

El martes próximo, más de 2.000 artistas participarán
del
"Desfile de Mayo", a cargo del grupo "Fuerza Bruta" que a través de
19 representaciones teatrales recorrerá los 200 años de historia
argentina.

Para el acto central del martes se espera la
asistencia de los
presidentes de Bolivia, Evo Morales; Brasil, Luiz Inácio Lula Da
Silva; Chile, Sebastián Piñera; Ecuador, Rafael Correa; Paraguay,
Fernando Lugo; Uruguay, José Mújica; y Venezuela, Hugo Chávez.