Políticos y activistas aseguran que ahora
más que nunca es importante que la comunidad hispana de Arizona se
registre para votar y haga valer sus derechos, tras la promulgación
de la ley que criminaliza la presencia de indocumentados en el
estado.

"La comunidad hispana, particularmente aquellos que tienen el
derecho a votar tienen en sus manos el poder de cambiar las cosas
que están sucediendo en Arizona", aseguró este lunes el abogado y
activista Antonio Bustamante.

En su opinión, la ley SB1070 debe servir como "un despertador"
para la comunidad hispana y hacerle entender que tan solo un voto
pude ser la diferencia.

"Tenemos que comenzar a elegir personas que realmente representen
los intereses de nuestra comunidad en el Legislativo estatal. No
vamos a lograr ningún cambio sino votamos", enfatizó Bustamante.

El pasado 23 de abril la gobernadora Jan Brewer firmó la ley
estatal SB1070, la primera en Estados Unidos en criminalizar la
presencia de inmigrantes indocumentados.

También otorga funciones de agentes de inmigración a los
departamentos policíacos y convierte en un delito solicitar empleo
en las calles como lo hacen los jornaleros, entre otras
disposiciones.

"Esta ley sanciona tanto a los indocumentados como a los
residentes legales y hasta los mismos ciudadanos de este país",
advirtió el activista.

El abogado explicó que esta ley convierte a los indocumentados
culpables de un delito menor en el estado, por el que podrían pasar
hasta seis meses de prisión.

"Yo dudo mucho que los indocumentados que sean arrestados bajo
esta ley sean encarcelados, pero sí serán puestos de inmediato bajo
el proceso de deportación particularmente aquellos que no tienen un
récord criminal", explicó Bustamante.

La SB1070 también sanciona a los extranjeros que no traigan
consigo sus documentos de inmigración al momento que les sean
solicitados por las autoridades.

"Esta ley penaliza también a toda persona que pueda llevar en su
carro o pueda tener en su casa como huésped a un inmigrante
indocumentado", dijo Bustamante.

El próximo mes de noviembre se llevarán a cabo elecciones en
Arizona en las que se elegirán gobernador y varios representantes en
contiendas en las que destaca el ex candidato presidencial John
McCain, quien busca reelegirse como senador por el Partido
Republicano.

"Hay que apreciar el valor de votar, se tiene que tomar un
orgullo y responsabilidad cívica", comentó Richard Miranda,
senador estatal demócrata.

Añadió que si algo positivo ha resultado de la firma de esta
nueva ley estatal es ver a tantos jóvenes involucrándose en el
movimiento, muchos de ellos ciudadanos de este país, hijos de
inmigrantes.

Jóvenes como Clara Ramírez, de 20 años y residente de la ciudad
de Phoenix, quien el pasado domingo se unió a miles de personas que
salieron a las calles en Arizona para condenar la SB1070 y pedir una
reforma migratoria.

"La primera vez que voté fue cuando cumplí los 18 años de edad y
fue por el presidente Barack Obama, porque creía que él representaba
un cambio positivo para este país", dijo Ramírez, quien se
siente decepcionada de la actitud de la presente administración con
respecto al tema migratorio.

"Mis padres son de México y aunque yo soy ciudadana por haber
nacido en EEUU siento mucho miedo que ahora la policía nos pueda
detener solamente porque tenemos los ojos y el cabellos oscuro",
confesó la estudiante.

Señaló sentirse frustrada de que muchos de sus amigos, que son
indocumentados, han visto sus sueños y aspiraciones frustradas
solamente por no tener un número de Seguro Social