El presidente de Estados Unidos,
Barack Obama, concurre este domingo a un oficio fúnebre por los 29 mineros
muertos hace tres semanas en un accidente en un yacimiento de
Virginia Occidental, donde reiterará su decisión de evitar tragedias
similares.

La ceremonia se llevará a cabo en el Centro de Convenciones
Beckley Raleigh y, además de Obama, asistirán el vicepresidente, Joe
Biden, el gobernador del estado, Joe Manchin, y los senadores Jay
Rockefeller, Robert Bird y Nick Rahall.

"Todo el trabajo duro, las dificultades, todo el tiempo bajo
tierra fue por sus familias. Para tener un auto frente a la casa, un
techo para la familia, la oportunidad de darle a sus hijos las
oportunidades que ellos no tuvieron y de disfrutar la jubilación con
sus esposas", dirá Obama, según porciones de su discurso adelantadas
por la Casa Blanca.

Estos mineros "trabajaron con la esperanza de lograr algo mejor,
vivieron y murieron buscando el 'sueño americano'", de acuerdo con
el presidente.

Obama recuerda que en los días que siguieron a la explosión en la
mina Upper Big Branch, el 5 de abril, llegaron cartas y mensajes
electrónicos a la Casa Blanca que venían de diferentes sitios pero
todos con un encabezamiento similar: "Soy la hija de un minero" o
"vengo de una familia de mineros".

"Todos pidiéndome que no olvide a los mineros, que nunca
olvidemos que son los mineros los que mantienen al país funcionando,
y todos con un ruego simple: no permitamos que esto vuelva a
ocurrir", añade.

"No podemos recuperar a los 29 hombres que perdimos", dice el
texto. "Están ahora con el Señor. Nuestra tarea, aquí en la tierra
es impedir que se pierdan más vidas en otra tragedia de este tipo".

El gobernante estadounidense ha pedido responsabilidades sobre el
accidente, el peor desastre minero en EE.UU. en más de cuatro
décadas, del que ha culpado sobre todo a la empresa propietaria del
yacimiento, Massey Energy.

Esta firma, que posee 44 explotaciones mineras en varios estados,
ha sido multada por varios incidentes, algunos de ellos fatales en
los últimos años, incluyendo un incendio ocurrido en 2006 en una de
sus minas.

Massey Energy se declaró culpable de diez delitos vinculados a
ese siniestro y en 2009 fue condenada a pagar 2,5 millones de
dólares en multas.