La subasta de Inquirer, programada para el 27 de abril se aproxima y con su llegada las especulaciones sobre el valor de la compañía llegarán a su fin.

De acuerdo con los expertos, algunos medios impresos han sufrido una baja en el precio de sus acciones hasta de un 80 por ciento debido a la recesión y la competencia con los medios informativos en Internet. La subasta de The Inquirer será un precedente para fijar el valor aproximado de otros periódicos metropolitanos en el país, luego del declive de la industria en los últimos años.

La compañía, en bancarrota desde febrero del 2009, fue comprada hace cuatro años por $515 millones.

El año pasado los prestamistas rechazaron una oferta de $67 millones en efectivo y propiedades, para saldar la deuda de $318 por parte de Philadelphia Newspapers.

Los prestamistas habían valuado la compañía en $85 millones, mientras que la única oferta, por parte de un grupo de inversionistas locales, fue de $80.5 millones. Los estimados más generosos valúan la compañía en $88 millones.

“Hay pocos precedentes recientes en la venta exitosa de periódicos metropolitanos que puedan ayudar a establecer el valor justo en el mercado”, dijo el economista, Jim Friedlich, de la firma de inversionistas en Nueva York, ZelnickMedia.

Las más recientes ventas incluyen al Chicago Sun-Times, y sus 58 periódicos suburbanos, en $25 millones, el otoño pasado.

Así reportó The Inquirer