La presidenta electa de Costa
Rica,
Laura Chinchilla, inicia este lunes una gira por Centroamérica para
analizar problemas comunes de la región, como el narcotráfico, y
ratificar su apoyo al presidente de Honduras, Porfirio Lobo, tras la
crisis política que sufrió ese país por el Golpe de Estado de 2009.

"Centroamérica
es una prioridad que hemos definido para nuestra
futura administración y estoy convencida que, con un diálogo
permanente y con la comprensión de nuestras propias realidades,
vamos a alcanzar importantes avances en la lucha contra los retos
comunes", expresó Chinchilla el viernes al anunciar su viaje.

La
próxima gobernante costarricense visitará a los
presidentes de El Salvador, Mauricio Funes, y de Honduras, mientras
que el martes se entrevistará con el de Guatemala, Álvaro Colom, y
el de Nicaragua, Daniel Ortega.

La mandataria electa dijo durante
su campaña política que iba a
poner especial énfasis en las relaciones de Costa Rica con sus
vecinos centroamericanos, con el fin de aumentar la cooperación y
fortalecer los vínculos, para lo que la gira de dos días es un
primer paso.

Chinchilla ha defendido en varias ocasiones la
legitimidad del
Gobierno de Lobo en Honduras, cuestionado por algunos países por
haberla logrado en unos comicios celebrados bajo un régimen de facto
tras el derrocamiento en junio pasado del entonces presidente,
Manuel Zelaya.

Se espera que, al igual que lo ha hecho el
presidente Óscar
Arias, ratifique el apoyo de Costa Rica al Gobierno hondureño.

La
futura presidenta comentó el viernes pasado que toma esta gira
con "un gran optimismo" sobre la mejora de las relaciones y la
cooperación con sus vecinos en retos comunes como "el narcotráfico,
la delincuencia organizada y el mejoramiento de la calidad de vida"
de sus poblaciones "en materia ambiental y social".

También ha
mostrado interés en fortalecer los vínculos con
Nicaragua, país con el que Costa Rica comparte frontera y con el que
durante el Gobierno de Arias se han presentado algunos roces,
especialmente en materia de integración regional.

Nicaragua ha
criticado a Costa Rica en los últimos años por
negarse a integrar la Corte Centroamericana de Justicia (CCJ) y el
Parlamento Centroamericano (Parlacen), órganos que Arias considera
"onerosos" e "inútiles".

"Tengo claras las diferencias puntuales y
conceptuales que
tenemos con algunos de ellos (países centroamericanos), para eso
nuestra política será de diálogo permanente, tolerancia en las
diferencias y búsqueda de puntos de encuentro", manifestó Chinchilla
el viernes.

Este es su segundo viaje al exterior como presidenta
electa, pues
en febrero pasado participó en la Cumbre del Grupo de Río en México.

La gobernante electa
recibirá el poder el próximo 8 de mayo de
manos de Arias y se convertirá en la primera presidenta en la
historia de Costa Rica.

A su ceremonia de investidura han
confirmado la asistencia todos
los presidentes centroamericanos, excepto el nicaragüense Daniel
Ortega, según ha informado la comisión encargada de organizar el
evento.