“Nosotros no fuimos atacados por estar dentro de una pandilla. Obviamente fuimos atacados por nuestra raza, por ser asiáticos”, dijo un estudiante que contestó al reporte del juez retirado, James Giles.

Giles, por su parte, afirmó que los ataques no habían sido sólo por problemas raciales sino pandilleros. 

A su tiempo, la abuela de Hao Luu, jóven atacado el pasado 2 de diciembre por 15 estudiantes, presentó su declaración ante la Comisión de Reforma Escolar alegando que su nieto fue brutalmente golpeado en la escuela South Philly High y fue suspendido por rumores que lo vinculaban con una pandilla.

Sin embargo, las autoridades escolares dicen que Hao Luu, originario de Vietnam, era un estudiante problemático que tuvo una pelea con otro y él mismo decidió no regresar a la escuela.

Cerca de una docena de estudiantes asiáticos declararon que el juez que investigó los hechos ocurridos en el ataque del 2 de diciembre no pudo  entrevistar a todas las víctimas y los testigos que se tenían. “Escribió un informe inexacto sobre lo que dijeron los entrevistados”, señaló un estudiante asiático.

El Distrito Escolar se encuentra trabajando en las conclusiones del informe.

Fueron siete estudiantes los que terminaron en el hospital después del incidente entre afroamericanos y asiáticos en donde por lo menos 30 estudiantes estaban involucrados.

Después de los hechos, 18 jóvenes fueron suspendidos de la escuela, ocho ellos asiáticos

Así reportó The Inquirer.