Cerca de 180
policías de unidades
especializadas pasarán a patrullar las calles de Los Ángeles a
partir del próximo 28 de marzo, en una segunda ronda de
reasignaciones debido a los recortes en el presupuesto de la ciudad.

El
capitán Jorge Villegas, comandante del Área Central del
Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), señaló este mièrcoles que
el cambio refuerza las estaciones locales garantizando el número de
efectivos para mantener la continua disminución de la delincuencia.

"Todos
los 176 oficiales activos que serán movilizados en esta
segunda tanda están actualmente asignados a divisiones especiales
dentro de la Oficina de Operaciones Especiales", explicó Villegas.

El
jefe de LAPD, Charlie Beck, justificó esta segunda ronda de
movilizaciones en que su prioridad es suplir las necesidades de
personal en las áreas de operaciones.

"Los capitanes de las áreas
(de operación) deben estar
adecuadamente abastecidos para, luego, poder responder por la
reducción de la delincuencia" señaló Beck.

Debido a que las
divisiones Metropolitana y de Pandillas y
Narcóticos son las más grandes de las 10 divisiones especializadas
del LAPD, cerca de la mitad de los oficiales redistribuidos
provienen de ambas, anotó Villegas.

Aunque los cambios buscan
cubrir las necesidades de patrullaje
ocasionadas por las restricciones en el pago de horas extras debido
a los recortes en el presupuesto, no son una medida extraña al
funcionamiento normal del departamento.

"Aún en mejores tiempos
presupuestarios, la movilización de
oficiales es un proceso que nunca se detiene", aclaró el comandante
del Área Central del LAPD.

"Al menos cuatro veces al año
realizamos una amplia evaluación de
la asignación de oficiales en toda la ciudad y otros ajustes pueden
hacerse hasta cada 28 días", añadió.

Al falta de fondos para el
pago de horas extras, LAPD compensa el
tiempo adicional trabajado por los oficiales con días de descanso
obligatorio, lo que lleva a una reducción del personal que está
siendo cubierto con las reasignaciones.

Con los movimientos, la
División Metropolitana se reduce en cerca
de 50 oficiales, equivalentes a un cuarto del número total. Sin
embargo, se espera que la reducción de los grupos especializados no
afecte su productividad.

Previamente, en el mes de enero, cerca
de 140 oficiales habían
sido movilizados de unidades especializadas a las estaciones locales
de policía.

La semana anterior, el Departamento igualmente
anunció que
transferirá varios empleados de la Sección de Contratos de
Servicios, que atiende los permisos para filmaciones de películas en
la ciudad, hacia operaciones de patrullaje.

"Los cambios han sido
hechos considerando el volumen total el
número oficiales de cada división especializada de manera que no se
afecte la efectividad de su operación", destacó Villegas.

El
oficial señaló que cada unidad especializada mantiene un
número de oficiales suficiente para operar, "sin perder su capacidad
para producir resultados".

Al contrario, el desplazamiento de
oficiales muy experimentados
"a las calles" aporta la excelente experiencia de estos oficiales
para el combate de la delincuencia y la lucha contra las pandillas
en el trabajo diario de las estaciones de policía, sostuvo.

Según
las últimas estadísticas presentadas por LAPD, hasta el 13
de marzo los delitos violentos disminuyeron en más del 15 por ciento
en comparación con el mismo período del año pasado.

Los crímenes
contra la propiedad se redujeron en más de 8 por
ciento y el total de delitos del Apartado 1 (violentos y contra la
propiedad), bajó en 9,6 por ciento.

Los homicidios atribuidos a
las pandillas disminuyeron más del
525 en lo que va del año y el número de víctimas de disparos por
parte de pandilleros decreció en 16,5 por ciento.