La nueva directora
del Festival
Iberoamericano de Teatro de Bogotá (FITB), Ana Marta de Pizarro,
afronta desde el viernes el reto de culminar la obra que inició Fanny
Mikey, quien fundó hace 22 años este prestigioso certamen y falleció
en 2008.

Con motivo el viernes de la inauguración del FITB, el primero
sin su
fundadora, De Pizarro dijo en una entrevista a Efe que su objetivo
es hacer un gran homenaje a Fanny Mikey, una argentina que llegó a
Cali en 1958 para subirse a un escenario y desde entonces convirtió
a Colombia en su nación y luego sede de uno de los festivales
teatrales más importantes del mundo.

La paradoja de la vida llevó
a esa llamativa actriz de cabello
rojo a fallecer también en Cali, donde en agosto de 2008
representaba y dirigía una función teatral.

El primer desafío
para De Pizarro fue conseguir algunos de los
retos que Mikey se había trazado en vida, como tener en el FITB dos
extraordinarias versiones de "Medea", una alemana y otra japonesa.

"Corrimos
con la fortuna de encontrar personas amigas que
trabajan hoy en día con Frank Castorf, un director emblemático, pero
que siempre ha sido el niño terrible y malo del teatro alemán, y
digo malo porque se atreve a decir cosas que otros no dicen",
explicó la nueva directora sobre la versión germana de "Medea".

Otra
obra por la que Mikey "luchó en la versión anterior
infructuosamente", según De Pizarro, fue la "Medea" del japonés
Satoshi Miyagi, que se representará ahora en Bogotá.

Además,
"traemos unas marionetas que Fanny y yo habíamos visto en
Nueva York. Son las marionetas de Georgia con el espectáculo 'La
batalla de Stalingrado'", apuntó.

La nueva directora también hizo
referencia a las dificultades del
montaje de "La última cinta de Krapp" de Samuel Beckett, dirigida
por el reconocido director y actor estadounidense Bob Wilson.

El
montaje "es muy especial, muy difícil, muy costoso y nosotros
finalmente logramos traerlo con las mismas condiciones técnicas con
las que él se presenta en cualquier parte del mundo", destacó.

De
Pizarro, que acompañó como gestora del festival a Mikey desde
los inicios, calificó estas iniciativas como los "sueños" que no vio
cumplidos su antecesora.

Mientras recorre la Ciudad Teatro, donde
ha quedado instalada una
carpa circense y escenarios al aire libre para cuentacuentos,
narradores, títeres y conciertos, De Pizarro asegura que "todo está
listo".

"Hoy abrimos las 22 salas, mañana inauguramos el teatro
callejero
con un espectáculo que va a ser muy interesante", explicó sobre el
desfile multicolor del sábado que recorrerá las calles de Bogotá
encabezado por una marioneta gigante de Fanny.

Pizarro explicó
que en total habrá "2.800 personas entre actores,
dramaturgos, directores y técnicos de 40 países".

En esta XII
edición del FIBT, que se celebra cada dos años, los
invitados de honor son Cataluña y Baleares, "una maravillosa
embajada" formada por artistas y poetas de esas comunidades
autónomas españolas, según De Pizarro.

Entre la variada cartelera
catalana y balear figura "Cuttlas", el
pistolero que salta del cómic a las tablas e incorpora en su debut
"el teatro negro de Praga y las marionetas del Japón", detalló.

Otros
representantes de Cataluña y Baleares serán los actores
Sergi López, con un monólogo; Pep Tosar, que hará una puesta en
escena de textos del italiano Antonio Tabucchi; y la cantante Concha
Buika, que homenajeará a Chavela Vargas.

También Álex Rigola, el
director del Teatre Lliure, quien afronta
"un reto impresionante": la aventura de llevar al teatro la novela
"2666", del chileno Roberto Bolaño.

El director del Instituto
Ramón Llull, Josep Bargalló, cuya
institución se encarga de difundir en el mundo la cultura catalana,
dijo hoy que ser invitados de honor en el FITB "cierra un ciclo"
marcado por el "acento catalán".

Llull se refería a que en 1988,
cuando se fundó el festival, las
compañías Els Joglars y Els Comediants abrieron y cerraron,
respectivamente, aquella primera edición; y ahora, con Ana Marta de
Pizarro a la cabeza, Cataluña vuelve a ser protagonista. EFE