La Asociación Nacional de
Industriales de Honduras (ANDI) declaró ayer "primer héroe nacional
del siglo XXI" al presidente de facto Roberto Micheletti por su
labor tras el golpe de Estado que el 28 de junio derrocó a Manuel
Zelaya.

El presidente de la ANDI, Adolfo Facussé, entregó a Micheletti
una placa de reconocimiento en la que se le declara como "Primer
héroe nacional del siglo XXI en defensa de la democracia y la
libertad en Honduras. Un ejemplo para el mundo entero".

Micheletti asumió el poder en Honduras el 28 de junio de 2009 por
designación del Parlamento, tras el derrocamiento de Zelaya por los
militares.

El mandato de cuatro años para el que fue elegido Zelaya finaliza
el próximo 27 de enero, cuando asumirá el cargo el presidente
electo, Porfirio Lobo, del Partido Nacional, ganador de las
elecciones del pasado 29 de noviembre, que estaban programadas antes
del golpe y en las que el presidente depuesto no podía ser candidato
porque la Constitución no autoriza la reelección.

Facussé resaltó que Micheletti es un "personaje de primerísima
actualidad" porque es quien "detuvo a (Hugo) Chávez (presidente de
Venezuela) y es el que dio la batalla contra el insulso (José
Miguel) Insulza (secretario general de la Organización de Estados
Americanos)".

Micheletti, añadió Facussé, también se supo enfrentar a los
gobiernos de Argentina, Brasil y España, que entre muchos otros
condenaron el golpe de Estado a Zelaya y en su momento pidieron su
restitución.

"Pensamos que necesitamos y queremos seguir contando con su
liderazgo, usted inspiró por la democrática libertad, vamos a
reconocerlo como un héroe que su labor no termina el 27 de enero",
enfatizó Facussé.

El empresario recordó así que Micheletti debe volver a presidir
el Partido Liberal, al que pertenecen tanto él como Zelaya, para
"reconstruirlo".

Micheletti también "queda como vicepresidente de la Internacional
Liberal", acotó el presidente de la ANDI.

El gobernante de facto destacó el trabajo que han hecho junto con
él las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional, los diputados del
Parlamento, sus ministros y muchos otros sectores sociales que creen
en la democracia.

"Aquí estamos varias personas que participamos en esto, aquí hay
varios grupos, hombres y mujeres que han participado en esta ardua
labor, en esta actividad para defender la democracia de nuestro
país", subrayó.

"Yo no tengo con qué pagarle a Dios esta satisfacción que me ha
dado en estos momentos de mi vida, cuando todo el mundo estaba de
espaldas a nosotros, que no querían entender que nuestra
Constitución nos da el derecho de hacer lo que hicimos los
hondureños", dijo.

Asimismo, señaló que no guarda ningún resentimiento contra nadie.

El Parlamento calificó la destitución de Zelaya y el nombramiento
de Micheletti como una "sustitución constitucional".

"Hoy el 95 por ciento de la población está de acuerdo con lo que
hicimos en aquel momento del 28 de junio", aseguró Micheletti.