Los procesos contra individuos
acusados de violar la leyes de inmigración de EE.UU. subieron un 15,7
por ciento en el año fiscal 2009 respecto del anterior, según un
estudio de un centro de investigación de la Universidad de Syracuse.

En el ejercicio fiscal que concluyó el 30 de septiembre, los
procesamientos relacionados con delitos de inmigración ascendieron a
91.899, comparado con 79.431 casos en el ejercicio anterior, según
el análisis del centro Transactional Records Access Clearinghouse
(TRAC) que difundió el martes en su página web.

Se da la circunstancia de que del total de casos tramitados este
año tan sólo 13 empresarios fueron procesados por contratar
inmigrantes indocumentados.

El fuerte alza en los procesamientos por delitos relacionados con
las leyes de inmigración llevó a que el total de casos tramitados
por las fiscalías federales en 2009 llegase a 169.612, lo que
representa una cifra récord y un alza de casi el 9 por ciento
respecto de 2008.

Ese total es además un 42 por ciento superior al número de
procesos abiertos por las fiscalías federales hace cinco años, según
el análisis que hace ese centro de datos del Departamento de
Justicia de EEUU.

El estudio de TRAC revela un progresivo aumento durante el
Gobierno del presidente George W. Bush de los procesos federales por
delitos de inmigración, comparado con los ocho años anteriores de
mandato del presidente Bill Clinton y un fuerte ascenso en los dos
últimos años, incluido el primero del mandato de Barack Obama.

El estudio de los datos oficiales muestra que los procesos por
violación de las leyes de inmigración representan en la actualidad
el 54 por ciento del total de casos presentados por las fiscalías
federales en los tribunales y le siguen los relacionados con el
narcotráfico, aunque éstos representan sólo el 16 por ciento del
total.

Las acusaciones por entrada y re-entrada ilegal en Estados Unidos
son las que motivaron la gran mayoría de los procesamientos contra
inmigrantes iniciados por las fiscalías federales en 2009 y otro 3
por ciento de casos estuvieron relacionados por fraude en visados,
permisos de residencia u otros documentos de identificación.

Además de los 13 empleadores procesados este año por contratar a
indocumentados, otros 36 individuos fueron acusados de delitos de
menor gravedad, como reclutar o dar trabajo a un extranjero sabiendo
que no estaba autorizado para realizar la labor encomendada, según
el estudio.