La gira del presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, por Suramérica está generando rechazo y preocupación en la región y no solo entre las comunidades judías.

"Indeseable", "personaje ominoso", "representante del oscurantismo" y "negador del Holocausto" son algunas de las palabras usadas hoy por los críticos de Ahmadineyad en América Latina.

"Es incómodo recibir en Brasil al jefe de un régimen dictatorial. Al final de cuentas, tenemos un pasado reciente de lucha contra la dictadura", afirmó el gobernador de Sao Paulo, José Serra, en un artículo publicado hoy en el diario Folha de Sao Paulo.

Ahmadineyad inició hoy en Brasil su recorrido por Suramérica, donde ha encontrado aliados para hacer frente a la presión internacional que enfrenta su Gobierno principalmente por sus proyectos nucleares, pero también por su posición de negación del Holocausto y su presunta vinculación con grupos terroristas.

Mañana martes es esperado en Bolivia y después en Venezuela, países ambos que no tienen relaciones diplomáticas con Israel.

La gira ha estado precedida de manifestaciones de protesta, como la que reunió el domingo en una playa de Río de Janeiro a unas 2.000 personas que gritaron también contra el mandatario de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, por recibirle, y es motivo de comunicados de rechazo de comunidades judías de Bolivia, Venezuela y Uruguay.

Además, el fiscal argentino Alberto Nisman ha denunciado hoy que Ahmadineyad "protege a los acusados" de un atentado terrorista que causó 85 muertos y centenares de heridos en Buenos Aires, en 1994.

"No los entrega a la justicia argentina y encima les da inmunidad y cargos diplomáticos", agregó en declaraciones a una radio de Buenos Aires Nisman, quien reclama al Gobierno iraní la entrega de sospechosos de complicidad con el atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), entre ellos el ministro de Defensa, Ahmad Vahidi, y el ex presidente Alí Akbar Rafsanyani.

Al atentado de la AMIA, atribuido al grupo Hizbulá, se refirió también Serra en su artículo para Folha de Sao Paulo.

"¿Tiene sentido que recibamos de brazos abiertos al hombre cuyo ministro de Defensa es buscado por la Interpol debido al atentado al centro comunitario judaico en Buenos Aires?", se pregunta.

Serra aseguró que las acusaciones de la participación de Irán en los atentados contra blancos judíos en Buenos Aires no proceden de Estados Unidos o Israel sino de Argentina y consideró que Lula debería haber consultado sobre eso a la presidenta argentina, Cristina Fernández, a quien recibió en Brasilia la semana pasada.

El gobernador, favorito para ganar las presidenciales de 2010 en Brasil según las encuestas, señaló que Ahmadineyad revalidó su cargo en unas "elecciones tan fraudulentas" que las protestas contra los resultados se mantienen hasta hoy y son reprimidas por "fascistas que no dudan en asesinar manifestantes indefensos".

La Confederación de Asociaciones Israelitas de Venezuela (CAIV), que expresó hoy su "desazón y contrariedad" por la gira del dirigente iraní por varios países de América del Sur, también ha recalcado que Ahmadineyad encabeza un "régimen dudoso".

"Fueron unas elecciones sumamente cuestionadas, donde el pueblo iraní fue reprimido con ferocidad, dejando un saldo de muertos, heridos y numerosas personas torturadas en prisión", señala la CAIV en el comunicado.

Asimismo, recuerda que el nuevo ministro iraní de Defensa, Ahmad Vaihidi, está solicitado por la Interpol en relación con el atentado contra la AMIA y denuncia también los "importantes indicios de carácter bélico" del programa nuclear iraní.

La comunidad judía de Bolivia ve también con preocupación la visita del presidente de Irán, pero no convocará manifestaciones de rechazo porque respeta el derecho del Gobierno de hacer negocios y mantener relaciones bilaterales con todos los Estados.

Así lo señaló a Efe el presidente del Círculo Israelita en Bolivia, Ricardo Udler, quien criticó la negación del Holocausto por parte de Ahmadineyad y las amenazas públicas de "hacer desaparecer del mapa al Estado de Israel".

"Sabiendo que es un país que se está preocupando por el enriquecimiento de uranio y por una carrera armamentística, por supuesto que preocupa sobremanera y, creo yo, no solo al Estado de Israel, sino que esto debería preocupar en demasía a todos los Estados del mundo", señaló Udler.

En Montevideo, miembros del Comité Central Israelita de Uruguay se concentraron hoy a las puertas de la embajada brasileña para expresar su "preocupación" por la visita de Ahmadineyad a Brasil.

"Las señas que emite el régimen iraní lo hacen, muy claramente, el más parecido que ha habido desde el fin de la Segunda Guerra Mundial al régimen nazi", dijo a Efe el presidente de esa organización hebrea, Marcos Israel, quien hizo entrega de una carta al embajador brasileño en Montevideo, José Eduardo Felicio.

"Queremos recordarle al Gobierno brasileño a quién están recibiendo", indicó el presidente del Comité Central Israelita.

La manifestación que tuvo lugar este domingo en la playa de Ipanema de Río de Janeiro para rechazar la visita al país del mandatario iraní tuvo como uno de sus lemas "¿qué invitado es éste?" y reunió a representantes de las comunidades judía y árabe, grupos religiosos de raíz africana, agrupaciones de homosexuales y particulares.

Además de la marcha de Río, también se convocaron concentraciones de repudio en Brasilia frente a la sede de la cancillería y en algunas otras ciudades del país.